Vecinos y expertos rechazan la instalación de la central térmica, alegando que representa un riesgo para la salud pública y el medio ambiente en la ciudad
La Autoridad Portuaria de Las Palmas aborda el proyecto de la planta de gas
Cadena humana contra la central eléctrica en el Puerto de La Luz
Este sábado, una gran cadena humana se formó en la pasarela Onda Atlántica de Las Palmas en rechazo al proyecto de la central térmica que se planea instalar en el Puerto de La Luz. Los manifestantes consideran que la planta supone un grave riesgo para la salud de los vecinos de la zona.
Un riesgo para la salud
María Luisa Pita, exjefa de Sanidad Ambiental, expresó su preocupación por los peligros que conlleva esta infraestructura. Según Pita, la planta emitiría contaminantes las 24 horas del día, durante todo el año, afectando especialmente a los residentes de La Isleta. «La contaminación atmosférica es un riesgo para todos, pero más aún para niños, ancianos y personas con problemas respiratorios», dijo Pita.
Impacto en la calidad del aire
Pita destacó que los gases y partículas emitidos por la planta, aunque menores que los de otros combustibles, podrían penetrar profundamente en el sistema respiratorio. «La población no debería tener que aislarse para protegerse», subrayó, instando a ubicar la planta en un lugar sin población cercana.
El proyecto cuestionado
El abogado ambientalista Antonio Hernández se sumó a las críticas, rechazando el proyecto que planea usar gas natural licuado. Aunque este combustible genera menos contaminación que otros, sigue produciendo gases de efecto invernadero. Hernández instó a los empresarios del puerto a leer el estudio de impacto ambiental y reflexionar sobre las implicaciones del proyecto.
Oposición institucional a la central térmica
El Ayuntamiento de Las Palmas y el Cabildo de Gran Canaria se han opuesto al proyecto, considerando que su impacto ambiental sería negativo para la ciudad. Ambos han señalado que el estudio de impacto ambiental del proyecto es deficitario y carece de rigor.
Próximos pasos
Los convocantes de la protesta planean reunirse el próximo 26 de noviembre con la presidenta de la Autoridad Portuaria de Las Palmas, Beatriz Calzada, cuya postura favorable al proyecto consideran «inconcebible». El colectivo sigue luchando por una ciudad más sostenible y menos contaminante, al tiempo que busca una solución que no ponga en riesgo la salud de los ciudadanos.