La organización pesquera advierte sobre la presión de flotas de China y Turquía y pide a la UE y a los países africanos una gestión sostenible de los recursos

El presidente de la Organización de Productores Pesqueros ANACEF, Francisco Freire, ha advertido sobre una reducción significativa de capturas en las costas africanas, principalmente en Mauritania y Guinea Bissau, debido a la competencia desleal de flotas de países como China o Turquía. Freire criticó que, mientras la Unión Europea mantiene acuerdos pesqueros con estos países bajo criterios de sostenibilidad, se permite la actividad de flotas extranjeras que no cumplen los mismos estándares.
La flota de ANACEF, compuesta por 19 buques, opera en el Atlántico suroccidental y en caladeros como Mauritania, Guinea Bissau y, mediante acuerdo privado, Angola. La producción estimada para este año se sitúa entre 40.000 y 45.000 toneladas, con parte de los barcos también operando en las islas Malvinas.
Sobre Mauritania, Freire valoró el acuerdo vigente como de “luces y sombras”, dado que la UE paga por especies que su flota no puede capturar, lo que ha motivado una reevaluación científica de los recursos de cara a la próxima negociación en diciembre.

Según Freire, la UE identifica Senegal como «un país que no combate la pesca ilegal»
En cuanto a Senegal, indicó que el acuerdo que tenía la UE con este país «no» se pudo reanudar, ya que la Unión Europea «lo ha identificado como un país que no está luchando contra la pesca ilegal, no declarada y no reglamentada, y le han impuesto la tarjeta amarilla, previa a una tarjeta roja».
Durante unas jornadas sobre biodiversidad en Casa África, Freire defendió el modelo de pesca sostenible que aplica ANACEF, con científicos a bordo de sus buques y un control riguroso de la actividad.
En la misma línea, el director general de Pesca Sostenible, Ramón de la Figuera, subrayó la importancia del conocimiento científico en la gestión de los recursos pesqueros. Por su parte, el ministro de Pesca de Guinea Bissau, Mario Musante, insistió en la necesidad de cooperar internacionalmente para combatir la pesca ilegal y proteger unos recursos que “no son inagotables”.