Las labores de rescate se prolongaron durante tres jornadas, con más de 250 efectivos buscaron noche y día más supervivientes
Cinco años han pasado de la tragedia en el edificio Julián José, en Los Cristianos, en el sur de Tenerife, que se derrumbó llevándose la vida de siete personas y el desalojo de unas 90.
Las tareas de rescate se prolongaron durante tres días. La causa penal fue archivada al no poderse determinar ni el motivo ni la responsabilidad del hecho.
El edificio llevaba 44 años en pie y se desplomó una mañana causando una gran conmoción. Un inmueble antiguo construido con materiales de muy mala calidad. El edificio presentaba un notable deterioro por falta de mantenimiento. Los pilares debilitados y las innumerables obras de reforma que se llevaron a cabo sin control en sus bajos parecen haber tenido que ver en el colapso.
Un edificio con cuatro plantas y con 24 viviendas. El derrumbe se llevó la vida de siete personas que residían en el inmueble y que, con toda probabilidad, detectaron previamente las numerosas grietas que avisaban en las paredes, aunque nunca imaginaron el desenlace.
Las labores de rescate se prolongaron durante tres jornadas, con más de 250 efectivos buscaron noche y día más supervivientes.
Durante meses de investigó la causa del siniestro. Se buscaron responsables sin éxito. El juzgado dictó el sobreseimiento y archivó de la causa penal en medio de una guerra por los seguros.
Además del Ayuntamiento de Arona, varias de las partes implicadas recurrieron. Recursos que aún están pendientes en la Audiencia Provincial. El solar continúa vacío y cerrado.