El Operativo de Prevención y Extinción de Incendios Forestales del Cabildo desplegado desde el pasado 2 de junio y hasta el próximo 2 de noviembre cuenta con la participación de más de mil efectivos que vigilan los montes durante el día y la noche
La noche en el Centro de Coordinación Operativa Insular (CECOPIN) de Tenerife es tranquila, a pesar de la prealerta por viento no parece que haya ninguna amenaza y una llamada por radio de dos patrullas sobre el terreno lo confirma, una situada en un mirador y otra en una torre de vigilancia, quienes no quitan sus ojos del horizonte para prevenir incendios.
Todos ellos forman parte del Operativo de Prevención y Extinción de Incendios Forestales que el Cabildo de Tenerife ha desplegado desde el pasado 2 de junio y hasta el próximo 2 de noviembre, con la participación de más de mil efectivos que vigilan los montes de la isla durante el día y la noche, ante el riesgo que supone la combinación de altas temperaturas y emergencia hídrica.
A los que se suman, entre el 1 de julio y el 30 de septiembre, 920 patrullas y dos helicópteros con visión nocturna del Ejército de Tierra, a través de un acuerdo de colaboración con el Ministerio de Defensa bajo el nombre “Operación Prometeo”, para reforzar la vigilancia durante los meses de mayor riesgo.
La presidenta de la corporación insular, Rosa Dávila, realizó el pasado martes en la noche una visita para la prensa a las instalaciones del CECOPIN, situadas en uno de los laterales del Pabellón Santiago Martín, así como a dos patrullas, una en el Mirador de Montaña Grande y otra en la torre de vigilancia El Gaitero, ambas en distintos puntos de la carretera que lleva al Teide desde La Esperanza.


Medios con visión nocturna
Junto a ella también se encontraban la consejera de Medio Natural, Sostenibilidad, Seguridad y Emergencias, Blanca Pérez, el jefe del Estado Mayor del Mando de Canarias, el general de División Ramón Armada Vázquez, y otras autoridades técnicas, militares, de la Guardia Civil, Policía Canaria, BRIFOR y personal de emergencias.
Dávila recordó hay “un porcentaje muy importante de incendios que comienzan en la noche”, de ahí la importancia de sumar medios con “visión nocturna” que permiten apoyar a las patrullas de tierra y al dispositivo del Cabildo, que definió como “el mayor de la historia de la isla”.
Al tiempo que ha señalado que a día de hoy al menos dos personas “que se ha acreditado que cometieron el delito de incendiar el monte” en “horas nocturnas” están “entre rejas” y que conoce de primera mano “lo complicado que es parar un incendio” en una orografía como la tinerfeña, razón por la cuál ha puesto a disposición “todos los medios del Cabildo” para evitar que se repita lo ocurrido en 2023.
“Estamos viendo incendios terribles estos días en la península. Sabemos que apagar un incendio es complicado y por eso hemos puesto todo nuestro esfuerzo en que no ocurra. En tener vigilado el monte, en poder advertir a la población, en disuadir a aquellos que intencionadamente le meten fuego al monte y, sobre todo, en actuar de forma coordinada junto a quienes meten a los pirómanos entre rejas”, ha concluido.