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29 marzo 2024 1:02 am

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La prensa británica a la caza del miembro racista de la familia real

Los periódicos de Reino Unido buscan al miembro de la familia real que hizo comentarios sobre el color de la piel del hijo de los duques de Sussex

La periódicos de Reino Unido buscan identificar al miembro de la familia real que manifestó inquietud sobre el color de la piel del hijo de los duques de Sussex, Archie.

La crisis en la monarquía se profundiza después de la demoledora entrevista que los duques de Sussex, Enrique y Meghan, concedieron a la presentadora Oprah Winfrey. En la grabación, emitida el domingo en EE.UU. y el lunes por la noche en el Reino Unido, la duquesa admitió sus pensamientos suicidas y acusó a un miembro de la familia real de racismo.

«Meghan y Enrique: a la caza para identificar al miembro de la familia real que hizo un comentario racista sobre Archie», «Exigimos saber quién es el racista» o «¿Quién en la familia real cuestionó el color de la piel de su futuro hijo»… Estos son algunos de los titulares que los periódicos británicos dedican a la crisis.

Gabinete de crisis en Buckingham

El Partido Laborista, primero de la oposición, ha pedido investigar las acusaciones de presunto racismo en la monarquía.

El diario «The Times» revela que la reina Isabel II se negó el lunes a firmar un comunicado que los funcionarios del palacio de Buckingham habían preparado. Supuestamente la monarca pidió más tiempo para evaluar el escándalo antes de responder al contenido de la entrevista.

Al parecer, Isabel II, el príncipe Carlos (heredero al trono) y el príncipe Guillermo mantuvieron el lunes una reunión de «crisis» para evaluar la posible respuesta.

Atrapados en la monarquía

En la entrevista, la duquesa de Sussex dijo que, tras su boda en 2018, se sintió atrapada en la monarquía. Explicó que tenía restringidos los movimientos e incluso lo que podía o no decir, hasta el punto de que llegó a tener pensamientos suicidas.

Los duques, que serán padres de una niña este verano, aseguraron que algunos miembros de la familia real no querían que su hijo fuera príncipe y que el príncipe de Gales dejó de responder a las llamadas de su hijo Enrique. 

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