El objetivo de la actuación es incrementar y mejorar las labores de protección en la Reserva Natural Especial de Las Dunas de Maspalomas
La Consejería de Medio Ambiente del Cabildo de Gran Canaria, con Inés Jiménez al frente, llevó a cabo la primera experiencia piloto de vigilancia y control ambiental con drones de las zonas de uso restringido y exclusión de la Reserva Natural Especial de Las Dunas de Maspalomas.
El objetivo es incrementar y mejorar las labores de protección de este espacio natural protegido.
Esta actuación se desarrolló el pasado viernes, 17 de marzo, y formó parte de la decisión de la Consejería de reforzar esas tareas de vigilancia en la zona, entre los días 9 y 19 de este mes, debido a la mayor afluencia de visitantes a este enclave, derivada de la celebración del Carnaval de Maspalomas.
Así, el Servicio insular de Medio Ambiente incrementó el número de agentes presentes en ese lugar y, el viernes 17, contó con la colaboración de efectivos del Cuerpo General de la Policía Canaria y con la participación de una operadora de drones para actividades que no entran en el ámbito de la Agencia Europea de Seguridad Aérea para el apoyo aéreo mediante sistemas de aeronaves no tripuladas.
Como resultado de ese despliegue, los agentes de la autoridad realizaron un total de 570 intervenciones, que concluyeron con varias propuestas de sanción por la presunta comisión de infracciones a la legislación medioambiental vigente, derivadas principalmente del tránsito y/o estancia en zonas de exclusión o de uso restringido del espacio natural protegido.