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28 marzo 2024 9:02 pm

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Recurren a salvapájaros luminiscentes para proteger pardelas y aves en Tenerife

Se trata de una solución innovadora consistente en dispositivos de dos tiras de neopreno cubiertas por una pintura luminiscente y dotados de material reflectante

Imagen de una pardela en aguas canarias. Foto Web RTVC.

El Cabildo de Tenerife y Red Eléctrica de España han firmado un convenio para la protección de pardelas y otras aves de hábitos nocturnos en la isla mediante la instalación de salvapájaros luminiscentes en las líneas de transporte.

Para la protección de estas aves de hábitos nocturnos, se han instalado recientemente estos dispositivos en las líneas de transporte, una solución innovadora consistente en dispositivos de dos tiras de neopreno cubiertas por una pintura luminiscente y dotados de material reflectante.

Este proyecto supone una inversión de 40.000 euros y responde al compromiso de Red Eléctrica por preservar y conservar la biodiversidad, detalla la nota.

La pardela cenicienta (Calonectris diomedea) se incluye, además, desde enero del 2021, en la lista de especies focales más sensibles a la presencia de líneas eléctricas, conforme los criterios establecidos por Red Eléctrica en base al proyecto “Aves y Líneas Eléctricas. Cartografía de Corredores de Vuelo”.

Seguimiento

El convenio plantea realizar un seguimiento del impacto de la señalización con salvapájaros sobre la población de pardela cenicienta, y de otras especies de hábitos de vuelos nocturnos, en el entorno de las líneas eléctricas a 66kV Candelaria – Geneto e Icod de los Vinos – Cuesta de la Villa/Los Realejos.

De esta forma, se evaluará el efecto de este nuevo tipo de salvapájaros sobre estas aves.

Para ello se llevarán a cabo diferentes acciones, como el seguimiento de la nidificación, la siniestralidad y el estado físico de los dispositivos, y la caracterización del comportamiento de vuelo.

La monitorización de la población de pardelas se efectuará siguiendo la metodología de Red Eléctrica y por un periodo de dos ciclos anuales completos (incluyendo las cuatro estaciones: otoño, invierno, primavera y verano).

Una vez finalizado este periodo, se analizará la conveniencia de ampliar el plazo.

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