El Sindicato de Enfermería, SATSE, explica que no se trata de un privilegio, sino de una muestra de respeto hacia los trabajadores

El Sindicato de Enfermería, SATSE, en Las Palmas denuncia que el Hospital Universitario de Gran Canaria Doctor Negrín no dispone de un espacio adecuado para que el personal sanitario pueda descansar, comer y recuperarse de sus tareas diarias.
La cafetería de personal del centro se cerró hace varios años que y, desde entonces, no se ha habilitado ninguna dependencia que ofrezca privacidad y comodidad exclusiva para los y las profesionales, generando un malestar creciente entre el equipo sanitario.
Desde SATSE, consideran que la separación de espacios no es un privilegio, sino una muestra de respeto y consideración hacia quienes sostienen la atención sanitaria en el hospital. Es un compromiso institucional con la mejora de las condiciones laborales y con la calidad del servicio que se ofrece a la ciudadanía.
Por ello, solicitan a la Gerencia del hospital que se habilite una cafetería exclusiva para el personal sanitario, ubicada en una zona central que facilite el acceso y retorno a sus puestos de trabajo sin pérdida de tiempo. Además, demandan que esta cafetería tenga un horario de 24 horas, adaptándose a las diferentes jornadas y turnos del personal, incluyendo turnos nocturnos, diurnos, de 12 horas y guardias.

Normativa
Diversas normativas nacionales e internacionales, como las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS), subrayan la importancia de disponer de zonas específicas para la recuperación del personal en los centros de trabajo, especialmente en el ámbito sanitario.
También, la Ley de Prevención de Riesgos Laborales (Ley 31/1995) también establece el derecho de los trabajadores a contar con espacios adecuados para su descanso y seguridad en el trabajo. Sin embargo, la situación actual impide a los profesionales del hospital disfrutar de un entorno digno y seguro para sus pausas.
Además, la Constitución Española, en su artículo 40.2, señala que los poderes públicos deben velar por la seguridad e higiene en el trabajo. La convivencia en una misma cafetería para personal, pacientes, familiares y visitantes, sin una delimitación clara, genera colas, pérdida de tiempo y condiciones que no favorecen la privacidad ni la seguridad del personal sanitario. Esta situación no solo afecta su bienestar, sino que también puede incrementar el riesgo de contagios y transmisión de patógenos, poniendo en riesgo la salud de todos los que trabajan en el centro.