Los nacionalistas (CC) exigen al Gobierno una negociación de las aguas canarias con «luz y taquígrafo» y la inclusión de Canarias en la negociación
Coalición Canaria (CC) censura que el Gobierno del Estado «esté negociando con el Reino de Marruecos por la puerta de atrás las aguas canarias sin contar con el Gobierno canario». Los nacionalistas aseguran que condenan la celeridad en la negociación y advierten de que “no permitiremos que Sánchez juegue al trueque con la delimitación de las aguas porque las islas no son moneda de cambio ni de este ni de ningún Gobierno”.
La diputada de Coalición Canaria en el Congreso de los Diputados, María Fernández, asegura que confirmó tras una pregunta por escrito al Gobierno el pasado 11 de octubre la celebración de la última reunión entre ambos países para negociar la delimitación de la mediana “sin la presencia del Gobierno de Canarias”. Fernández sostiene la “gravedad” de que se mantenga al margen al Ejecutivo canario “en un acuerdo que afecta directamente a las islas”.
«Con luz y taquígrafo»
La diputada, que exigió al Estado una negociación “con luz y taquígrafos”, censuró que para el Gobierno de Pedro Sánchez “no seamos más que un lugar para ir de vacaciones o de intercambio en su desastrosa política exterior con Marruecos”. Asimismo, advirtió de que los nacionalistas canarios “no permitiremos que Sánchez y Mohamed VI se repartan las aguas sin contar con Canarias”.
Los nacionalistas reprochan las prisas de ambos países por cerrar un acuerdo. “Lo que no se ha conseguido acordar en décadas no puede solventarse en un par de encuentros a escondidas y de espaldas a Canarias”, aseveraron.
Según CC, desde que se retomaron las relaciones entre España y Rabat el pasado mes de abril Coalición Canaria «exigió la presencia de Canarias en las distintas comisiones, entre ellas las referidas a la delimitación de las aguas y la gestión de control de fronteras y políticas migratorias». «Sin embargo, desde un primer momento fue rechazado por el Gobierno de Pedro Sánchez y lo peor es que contó con el consentimiento del Gobierno de Canarias que ni se ha preocupado ni ocupado de defender los intereses del archipiélago”.