El antivirus canario

Los primeros fueron días muy duros. La falta de abastecimiento de productos hizo temer lo peor. Sin embargo, la evolución del coronavirus en las islas ha hecho por ahora a la pandemia más llevadera que en otras regiones. Canarias sigue dependiendo del exterior, pero va reinventándose, como puede, para plantar cara al Covid-19. El punto débil sigue estando en los test.



Este sábado llegó un nuevo cargamento al archipiélago. Entre las unidades más preciadas, los 100.000 hisopos -una especie de bastoncillos alargados- que estaban casi agotados y que servirán para realizar los test que muchos demandan. Junto a ellos, 36.000 equipos de protección (EPIs) y 18 toneladas de mercancía adquirida directamente por el Gobierno canario. La comunidad lleva ya 22 millones de euros invertidos en productos sanitarios. La cifra irá en aumento.



La remesa de este fin de semana da para un tiempo, pero son muchas las dudas que se plantean. ¿Hay en Canarias opciones para autoabastecerse de estos productos? ¿Puede el Gobierno regional aumentar el ritmo de pruebas?. La respuesta ideal sería una palabra: relativamente.



[img width=600 height=340 align=»center» caption=»Descarga de material. Foto EFE»]211513_descargamaterial.jpg[/img]



“Hasta la fecha”, apuntaban este sábado fuentes de la Consejería de Sanidad a esta Redacción, “la Consejería ha realizado más de 20.000 pruebas de diagnóstico PCR y la idea es que el ritmo de estos test diarios se duplique porque las máquinas que se usan necesitan de unos reactivos que ya tenemos”. Se trata de dos artefactos emplazados en Tenerife, al que brevemente se añadirá un tercero, cedido por el Estado, en Gran Canaria.



Dependencia



La dependencia externa castiga; y la presión que hay en el mercado para adquirir productos, también. Tal es así que el Ejecutivo prefiere reservarse el nombre de la compañía a la que ha realizado la última compra. Fue en Shangai y antes había tirado de Alemania. “La industria local que puede tener capacidad de elaborar test propios es más bien testimonial; no sería capaz de producir el número de unidades que se requieren ante una pandemia”, reconocen los mismos informantes.



Sanidad también aclara que la sintomatología condiciona los criterios que se siguen a la hora de decidir a cuándo y a quién se le hacen pruebas. “Si los síntomas son leves, es preferible hacerle un seguimiento telefónico diario, autoaislamiento y medidas de seguridad internas antes de recurrir a una prueba que podría dar un falso positivo o que no sería concluyente hasta que no se pase el ‘periodo ventana”, significa.



Otro aspecto significativo es que todos los test hechos han sido del tipo PCR, distintos a los test rápidos, tal como se explica en el gráfico adjunto. si bien la comunidad posee también test de anticuerpos que los usará como complemento en una futura medida de cribaje.



[img width=600 height=340 align=»center» caption=»Tipos de test y un operario desinfectando en Corea. Foto EFE»]211513_TEST2.jpg[/img]



En cuanto a las pruebas entre personas mayores y en residencias de ancianos, el Ejecutivo destaca que hasta ahora se han detectado en este ámbito unos 96 contagios. “A partir de la semana que viene se establecerá un protocolo para llegar a todo el colectivo”.



Tirando de tecnología canaria



En busca de alivio, investigadores del Instituto Tecnológico de Energías Renovables (ITER) y del Hospital de la Candelaria, han logrado modificar estos días el método de diagnóstico del Covid-19 con un procedimiento que permitirá reducir a la mitad -de cuatro a dos horas- el tiempo necesario para obtener el resultado de las pruebas para la detección del virus.



La reducción de tiempo viene acompañada por un menor empleo de fungibles comerciales, «evitando a su vez la dependencia de robots». Recurriendo a esta opción, se multiplicarían por dos el número de pruebas diarias. La ejecución de este nuevo protocolo ya ha sido validado y lo conoce el Servicio Canario de Salud (SCS).



El trabajo recuerda, de alguna manera, el avance que se ha dado en el norte de España, donde personal científico de la Universidad del País Vasco ha ideado un test alternativo para la detección del Covid-19. El profesor Ugo Mayor, que forma parte de esta investigación, estima en 15 euros el coste de cada unidad, sitúa en un 92% su grado de fiabilidad y cree que podrían realizarse entre 500 y 1.000 pruebas al día desde mayo y sin dependencia externa.



Más intendencia: las máscaras del ITC



Pero no sólo con test se lucha contra el coronavirus. Un ejemplo claro lo tenemos con el trabajo realizado desde el Instituto Tecnológico de Canarias (ITC). “Desde el primer momento se creó un grupo de voluntarios y cadenas de diseño se han dedicado a la fabricación de piezas y montaje de máscaras”, apunta Gilberto Martel, trabajador del complejo. Media docena de compañeros se afanan en la tarea en Pozo Izquierdo, y también en la isla picuda hay otro contingente significativo. La producción diaria en cada emplazamiento oscila entre las 250 y las 400 unidades, y hasta hace unos días ya habían despachado unas 9.000. El objetivo, suministrar todo lo que sea posible a Sanidad. “Ejercemos como canal mediador y coordinador”, destacan.



[img width=600 height=340 align=»center» caption=»Mascaras del ITC. Foto ITC»]211513_masca2.jpg[/img]



A la guerra se suman los coronamakers, y que también tienen entre sus filas a personal de las universidades canarias. Tiran de impresoras 3D y de la ayuda desinteresada de otros para crear máscaras. El complejo Hospitalario Universitario Insular-Materno Infantil, en Las Palmas de Gran Canaria, ya había repartido esta semana más de 6.000 unidades en centros sanitarios y sociosanitarios de la isla; también a miembros de los cuerpos de Seguridad del Estado. Todo cumpliendo con la normativa EN166-2002, que permite su homologacíón.



La industria se reinventa



En este recuento, la industria local no se queda atrás. Los geles hidroalcohólicos también integran la artillería. Hace ya varias semanas que la fábrica de Arehucas, en Gran Canaria, dejó de producir ron para volcarse en la elaboración de un tipo de alcohol de alta graduación para uso sanitario. “Hablamos con hospitales, farmacias e industrias químicas y ahora mismo tenemos a 8 personas de las 105 de la plantilla afanadas en ello”, relataba estos días a esta Redacción el Relaciones Institucionales de la firma, César Arencibia. “Habremos despachado cientos de miles de litros”.





[img width=600 height=340 align=»center» caption=»Gonzalo Ascanio. Foto Asinca»]211513_asinca.jpg[/img]



De la movilización también da parte Gonzalo Ascanio, el presidente de Asinca. “Con la ayuda de la Delegación del Gobierno y de varias consejerías hemos ido salvando obstáculos. Hay industrias de comésticos y de productos químicos ya fabricando geles hidroalcohólicos o a expensas de recibir en breve el plácet. Y luego hay otras en el campo textil que se han ofrecido, sin que hayan tenido más noticias”, incide. En la web de Asinca, un listado de compañías exponen sus potencialidades. El sector da trabajo a 40.000 empleos y genera el 7,3% del PIB canario. Hace, en definitiva, todo lo que puede para sumar efectivos a la causa.

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