El dueño de la granja acumula 14 denuncias por desatención, y se la ha abierto una causa penal por delito relativo a la protección de animales de compañía y domésticos
La Guardia Civil ha retirado a varios animales domésticos abandonados por su dueño «en condiciones deplorables» en una finca de Vallehermoso en La Gomera. El Seprona-Garajonay realizó una petición en el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de San Sebastián de La Gomera, tras la que el órgano judicial autorizó la retirada de los animales.
La finca se encuentra ubicada en el caserío de Los Manantiales-Chipude, donde detectaron, entre otros animales descuidados, a tres perros, dos pointer hembras, Pinta y Laika, y un mestizo, Felipe, además de una cabra «en unas condiciones higiénico-sanitarias deplorables, careciendo de comida y agua, presentando heridas sin curar uno de ellos”, según detalla el atestado.
La resolución judicial detalla que la cabra habría sufrido la realización de «un orificio en los cuernos, en los que se había introducido una verga metálica a modo de anilla para poder amarrarla”.
Desnutrición y lesiones
Los perros presentaban síntomas de desnutrición y en el caso de Laika, «lesiones dérmicas crónicas». Su dueño, al que se le ha retirado la guarda y custodia, acumula 14 denuncias de la Guardia Civil por irregularidades en el trato con los animales.
La orden de retirada se ha dictado después de tres días desde que se ordenara la apertura de las diligencias previas contra el propietario de la granja como presunto autor de delitos relativos a la protección de animales de compañía y domésticos.
Mientras, los tres canes pasarán a guarda y custodia de la entidad Pro Animal Gomera, “sin perjuicio de que tras valoración y los correspondientes trámites puedan adoptarse, previa autorización judicial”. Los demás animales quedarán bajo tutela del Área de Agricultura, Ganadería y Pesca del Cabildo Insular de La Gomera.
En el auto se detalla que, en el momento de la inspección de la finca por el Seprona, se encontraba en el lugar su dueño, “quien manifestó ser el titular de los animales y encontrarse en el lugar para echarles de comer, reconociendo que en ocasiones tardaba algún día en darles alimentación”.
Sin alimentación ni agua
Según la resolución, cuando los agentes inspeccionaron el lugar, el pasado 13 de marzo, se encontraron a los perros y al ganado caprino “ubicados en un cuarto de aperos o vivienda en estado de abandono, cerrados mediante una puerta metálica sujeta por una cuerda»; «. Se observaba el estado de la estancia «en condiciones higiénico-sanitarias deplorables, con excrementos, restos de madera, piedras y sobre un palet lo que parece que utilizaban como cobijo frente a las inclemencias meteorológicas para los perros”.
El informe continúa: “De igual modo se puede observar a uno de los perros con heridas o llagas sin curar o tratar en la zona trasera, sin ningún tipo de alimentación ni agua en ninguno de los cuencos destinados a tal fin».
«Asimismo, respecto del ganado caprino, se encontraba estabulado al tiempo de la inspección, sin identificación alguna por medio de crotales, careciendo de número de explotación y presentado uno de los ejemplares macho cabrío la realización de un orificio mediante perforación mecánico-manual en su cornamenta, a través del cual se procedió a introducirle una verga metálica a modo de anilla a efectos de ser usada como asidero a una cuerda y que el mismo quedase sujeto contra la pared”, concluye.