El Instituto Geográfico Nacional (IGN) localizó durante el mes de mayo 158 terremotos en el área de Canarias.
La magnitud máxima fue la de un seísmo de 2,8 que se detectó a las 13.17 (hora canaria) del 25 de ese mes, a 28 kilómetros de profundidad y con epicentro en el mar a unos 30 kilómetros al este de Las Palmas de Gran Canaria.
En esta misma zona, entre Fuerteventura y Gran Canaria, durante ese mes se localizaron otros ocho terremotos, todos ellos de menor magnitud.
La actividad mayor se registra entre Tenerife y Gran Canaria
En la zona entre Tenerife y Gran Canaria ha continuado la actividad durante ese mes, con un total de 76 terremotos localizados con magnitudes entre 0,1 y 2,5 y foco a profundidades entre 1 y 41 kilómetros.
El 21 de mayo se produjo un pequeño enjambre en esta zona, con 21 terremotos localizados desde las 8.28 a las 21.59 (hora canaria) con magnitudes entre 1,0 y 2,5 y profundidades entre 25 y 40 kilómetros.
En el interior de Tenerife la actividad se ha localizado principalmente en las zonas próximas a Vilaflor, Teide-Pico Viejo, Los Realejos y Arico, con un total de 59 terremotos con magnitudes entre 0,2 y 1,7 y profundidades entre 2 y 21 kilómetros.
Por Islas:
En el área de El Hierro se han localizado en ese mes 9 terremotos, con magnitudes entre 1,5 y 2,7 y profundidades entre 9 y 34 kilómetros.
La zona de La Palma durante ese periodo no ha tenido ningún terremoto.
Según la información transmitida por los ciudadanos de las islas mediante los diversos canales de comunicación, ninguno de los terremotos localizados durante ese mes ha sido sentido por la población.
La situación durante junio
También ha indicado que en lo que va de junio se han detectado 49 terremotos en el área de Canarias, el último de ellos a las 06.09 (hora canaria) al suroeste de Mogán (Gran Canaria), con magnitud 2,1.
Los datos de la Red Geoquímica de Vigilancia Volcánica en Tenerife, La Palma y El Hierro analizados, así como los de la Red de Estaciones Volcanomagnéticas de Canarias no muestran cambios asociados a variaciones relevantes en el estado de los sistemas volcánicos.
Del mismo modo, los resultados obtenidos a partir de las observaciones realizadas por las Estaciones Permanentes GNSS de la Red de Vigilancia Volcánica de Canarias y a través del procesado InSAR tampoco muestran ninguna deformación significativa que pueda asociarse con actividad volcánica.