El base canario Sergio Rodríguez retorna a la selección de baloncesto con vistas a disputar unos nuevos Juegos
La selección española se puso en marcha oficialmente hacia el desafío de los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 donde aspira a la cuarta medalla olímpica consecutiva, que el pívot Pau Gasol y el presidente de la Federación Española, Jorge Garbajosa, coincidieron en que firmarían si fuera de oro.
Con el regreso al equipo nacional del base canario Sergio Rodríguez, los jugadores de la convocatoria preparatoria de los Juegos, a excepción del ala-pívot Pierre Oriola que está en aislamiento temporal por contacto con un positivo, el cuerpo técnico y varias autoridades, se puso de largo oficialmente en un acto en la sede de Endesa en Madrid.
Lo hicieron saliendo uno a uno de una gran pantalla ubicada en el patio interior de la sede de la compañía, patrocinadora de la selección, ante un patio de butacas en el que estuvieron presentes el presidente del Consejo Superior de Deportes, José Manuel Franco; el de la Federación Española de Baloncesto, Jorge Garbajosa; el consejero delegado de Endesa, José Bogas; la vicealcaldesa de Madrid Begoña Villacís, el presidente de la ACB, Antonio Martín, y el presidente del sindicato de jugadores ABP, Alfonso Reyes.
Entre los primeros en salir, el base Ricky Rubio dijo que esta selección «aspira a lo máximo siempre» y reconoció que tiene «un poco» de responsabilidad de ser nexo entre los más veteranos y los jóvenes. Hasta se permitió una broma para los hermanos Hernangómez, Juancho y Willy. «Con ellos es un poco más difícil, pero vamos a intentar que se trasladen esos valores», bromeó el base catalán.
Tras él, uno de los veteranos. Rudy Fernández, que vivirá junto a Pau Gasol sus quintas olimpiadas, algo que le hace sentirse «muy feliz y mayor también, a la vez», una cita que afronta «con la misma ilusión» aunque cueste «un poquito» arrancar, y en la que se siente «privilegiado» por haber convivido con «estrellas, leyendas» como Juan Carlos Navarro o Felipe Reyes.
De veteranos a alguno de los más jóvenes, Juancho Hernnagómez, campeón del mundo con España y junto a su hermano en China 2019. «Ni en los mejores sueños hubiéramos imaginado ser campeones del mundo, y juntos, pero hay que seguir disfrutando día a día, seguir aprendiendo, porque nos queda mucho que aprender de estos jugadorazos», señaló.
Tanto Juancho como Víctor Claver coincidieron en que el apelativo de ‘La Familia’ que se aplica a este equipo es más que un ‘hashtag’ o palabra clave en redes sociales. «Sí, así es como nos sentimos, que somos parte de la familia, de un equipo y pase lo que pase durante la temporada tenemos ganas de volver a juntarnos y volver a disfrutar vistiendo la camiseta de la selección», añadió.
Pasar de los pronósticos
El último jugador de salir de esa pantalla fue Pau Gasol, que recordó el «orgullo» y el «placer» que le supone volver a la selección desde el Eurobasket de 2017 tras un año duro en el que se ha recuperado de una lesión de dos años y ha ganado la Liga Endesa con el Barça. «Sin duda ha merecido la pena. He trabajado mucho, en la distancia, y sin duda los resultados han sido magníficos y muy contento de tener esta oportunidad de estar con este equipo», dijo.
Preguntado por si firmaría una medalla, el mayor de los Gasol dijo que no es «de los de firmar» pero que «el oro sí lo firmaba». «Tienes que trabajar, tienes que ganártelo, competir, sufrir y ganarte la medalla o el resultado que consigas», recalcó.
El seleccionador de España, el italiano Sergio Scariolo dijo que esta selección pasa «bastante» de los pronósticos ya que su objetivo es «salir a competir» y ser «un equipo reconocible». «Luego puede salir mejor o peor, puedes tener más acierto o no, esa es nuestra preocupación. Cuando lo hacemos bien hemos sacado buenos resultados, en una competencia que crece de nivel, pero es un estímulo más», agregó.
El acto contó con la presencia de un joven, Víctor Molina, cuyo caso se hizo viral al ser el único jugador de un colegio que quería jugar al baloncesto, por lo que fue nombrado capitán de la afición, antes de que tomara la palabra el presidente de la Federación Española de Baloncesto, Jorge Garbajosa, que, tras un Eurobasket femenino «difícil en lo deportivo» con la derrota de España en cuartos de final y fuera del premundial, también fue optimista
«Yo el oro también (lo firmaba) La competición suele ser justa, es el momento de prepararse bien, de retomar mecanismos después de un año de actividad, con jugadores nuevos, y la competición dirá dónde llegamos. Los Juegos olímpicos son extremadamente duros, no hay margen para el error, y como hemos visto con las chicas u pequeño error, un tiro libre, te puede afectar. En agosto tendremos, no sé si una medalla al cuello, pero sí el orgullo», pronosticó.
El consejero delegado de Endesa, José Bogas, calificó a esta selección como «un equipo de leyendas» del que se sienten «orgullosos» como patrocinador; mientras que la vicealcaldesa de Madrid, Begoña Villacís, pidió a los jugadores que jueguen pensando en los niños que les verán desde sus casas y se podrán sentir animados a practicar el baloncesto.
«Ojalá que esta ciudad sea una cuidad olímpica y que sea camino de Madrid en lugar de camino de Tokio, sería perfecto. Mucha suerte… Tenéis un país detrás de vosotros», añadió Villacís.
Por último, el presidente del Consejo Superior de Deportes, José Manuel Franco, elogió la «altura» como personas de los jugadores, su unión como equipo y rindió homenaje al recién retirado Felipe Reyes. «Os desearía suerte, pero sé que la suerte os va a pillar trabajando como os ha pillado siempre. Hagáis lo que hagáis estaremos orgullosos», finalizó el secretario de Estado para el Deporte.