Los veterinarios salen diariamente a buscar animales y mascotas que pudieran haberse visto atrapados por la erupción
Los animales son también damnificados de la erupción volcánica. El ruido y las explosiones les genera un alto nivel de estrés. Muchos han huido lejos de sus dueños. Los que han sido encontrados llegan hasta los veterinarios deshidratados y con afecciones por la ceniza.
Física y emocionalmente también ellos sufren las consecuencias del volcán de Cumbre Vieja. Sienten un miedo similar al de los humanos. También son casi idénticos los síntomas que la combinación de gases y ceniza provoca en animales y mascotas.
Grupo de veterinarios
Para protegerlos de sus devastadores peligros se han puesto en marcha unidades de emergencias con veterinarios incluidos que salen diariamente a su rescate.
Para muchos de ellos el Polideportivo Eusebio Barreto se ha convertido en su hogar. Allí los alimentan y los cuidan aunque dicen que faltan medios por lo que cualquier ayuda será bien recibida.
