La rectora de la ULL, Rosa Aguilar, afirmó que la universidad arbitrará las medidas necesarias para que los alumnos palmeros no renuncien a sus estudios
La Universidad de La Laguna (ULL) trabaja para que ninguno de sus alumnos de La Palma tenga que renunciar a sus estudios por la erupción volcánica y arbitrará las medidas que sean necesarias para afrontar sus matrículas y costes de alojamiento para que ninguno de ellos «se quede sin futuro».
De esta manera se ha expresado la rectora de la ULL, Rosa Aguilar, en su discurso con motivo del acto de inauguración del curso académico 2021-2022, que ha comenzado con un mensaje de solidaridad con La Palma, isla que vive «momentos de máxima tensión y angustia».
Es hora de ser prudentes y de, ante todo, mantener la vida a salvo, ha proseguido la rectora, quien ha confiado en que los graves destrozos causados por la erupción sean repuestos con ayudas ágiles y eficaces «lo antes posible».
«Queda mucho camino por delante en esta tarea», pero la solidaridad de los canarios «ante esta tragedia sin precedentes estará a la altura», ha subrayado.
Apertura de curso en la ULL
La rectora de la ULL ha advertido de que el centro docente no puede quedarse «anquilosado» en el pasado. Asegura que necesita el «compromiso» del Gobierno de Canarias, que debe entender que estas instituciones son «la vanguardia de las islas».
En presencia del presidente de Canarias, Ángel Víctor Torres, la rectora de la Universidad de La Laguna (ULL) ha recordado que el centro le ha presentado el documento «Canarias ante la transformación necesaria», en el que se resalta el papel de las universidades públicas para salir de la crisis al abordar un profundo cambio del modelo económico de las islas con un aumento progresivo de la inversión en I+D.
Sin embargo, ha añadido, el Gobierno canario ha dado «tímidos pasos» para invertir la tendencia, algo «claramente insuficiente» si se quiere apostar por un cambio de modelo, ha lamentado la rectora de la ULL, que ha indicado que hasta el momento los únicos fondos recibidos para incentivar la investigación provienen del Ministerio.
Aboga por la una relación más directa
Aguilar ha insistido en que hay «mucho trabajo compartido por sacar adelante, muchos temas que abordar» con el Gobierno de Canarias. Por ello, se propone establecer «una relación mucho más directa y cercana para hacernos entender en todos los ámbitos y que nuestra colaboración como gestores de lo público sea aún más fructífera».
La ULL, ha proseguido, es una de las escasas nueve instituciones académicas de todo el país que cumple con los requisitos fijados por el Ministerio de Universidades en su Real Decreto de creación de centros universitarios en relación la docencia, la investigación y la plantilla de profesorado.
Cuenta con 48 grados, 36 másteres oficiales y 20 programas de doctorado, su plantilla docente está estabilizada y no supera el 40 por ciento de contratados laborales temporales, y está por encima del 80 por ciento de profesorado doctor a tiempo completo.
Por ello, este centro académico «es el único de Canarias que a día de hoy cumple con los criterios del Ministerio para ser reconocido como universidad, mucha distancia de la cada vez más abultada cantidad de centros privados que se despliegan» por la región, ha sostenido Aguilar.
Al respecto, la rectora ha agradecido «muy especialmente» la asistencia al acto del rector de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, Lluís Serra, con quien mantiene «una muy satisfactoria relación, muy buena coordinación y sintonía» porque son universidades públicas «hermanas» que no compiten entre ellas «por más que algunas voces traten de que así parezca».
Reclama un Plan de Ordenación Docente
La rectora, para quien la universidad ha salido «reforzada» de la enorme crisis del coronavirus, ha señalado no obstante que el centro no puede permitirse seguir instaurado en procesos anacrónicos ante los nuevos retos que llaman a su puerta, entre ellos, «la sangrante falta de personal administrativo y técnico».
También la ULL tiene el claro objetivo de disponer de un Plan de Ordenación Docente que responda a sus necesidades reales ante el «importante» déficit de muchos departamentos y las necesidades de contratación que aún siguen sin ser cubiertas.
«Seguimos arrastrando problemas del pasado que no acaban de solucionarse con medidas provisionales: es difícil transferir conocimiento al tejido productivo si no hay una plantilla estable y especializada dedicada a este específico fin», ha puntualizado la rectora, quien echa de menos «una estrategia regional a largo plazo» en esta materia.
Sobre las nuevas titulaciones, ha afirmado que está a la espera de que alguien la ilumine sobre lo sucedido con la tramitación del grado en Ciencias de la Actividad Física y del Deporte, que ha sido desestimado «con argumentos tan sorprendentes como la buena vecindad entre universidades y el necesario consenso entre ellas, cuando es evidente que no existe disenso en este sentido».
Rosa Aguilar ha pedido al presidente Torres que tome este asunto «de su mano y arregle este desaguisado incomprensible» porque, ha añadido, los universitarios «no entendemos de pleito insular, ni nos interesa lo más mínimo».
En el acto, al que también ha asistido la consejera regional de Educación, Manuela de Armas, la rectora de la ULL ha apostillado asimismo que la edificación de nuevos centros para las facultades de Educación y de Ciencias de la Salud «no admite más demoras», pues han tenido acciones de acondicionamiento «pero todo tiene un límite» y se precisa «urgentemente» de nuevos inmuebles.
La rectora fue precedida en su alocución por la secretaria general de la ULL, Elvira Afonso, quien leyó un resumen de la memoria académica del curso 2020-2021, y por la lección inaugural que impartió el catedrático de Química Orgánica Víctor Sotero, que versó sobre «La química orgánica sintética como ciencia esencial en el desarrollo de la Humanidad»