El programa de Observación de la Tierra de la Unión Europea ha actualizado sus datos este lunes. Los datos apuntan a una ralentización de la extensión que ocupa la lava
En la última actualización de Copernicus destacan que la extensión de la lava es de 993,7 hectáreas. Tan sólo ha crecido 0.1 hectáreas en las últimas 24 horas. Además según los datos recogidos no hay nuevas edificaciones destruidas.
En cuanto a las coladas, casi todo el flujo de lava está llegando a laprimera, la que llegó al mar y formó la fajana. También está recibiendo algún aporte la número 5, de la que aún no hay indicios de cómo evolucionará.
El Programa de Observación de la Tierra de la Unión Europea utiliza enormes cantidades de datos globales procedentes de satélites y sistemas de medición terrestres, aéreos y marítimos para proporcionar información que ayude a los proveedores de servicios, las administraciones públicas y otras organizaciones internacionales a mejorar la calidad de vida de la ciudadanía europea.
Los científicos hoy lo han confirmado en la rueda de prensa tras la reunión del Pevolca. El volcán se realimenta pero con menor intensidad. De ahí la continuidad de la sismicidad. El último sismo más intenso, de 4.6, se registró este domingo a 37 kilómetros de profundidad.
Hay síntomas de que los reservorios de magma disminuyen pero no se puede hablar del fin de la erupción. Mientras las coladas continúan estables con aporte en la principal y en la ramificación número 5. Preocupa y mucho la emisión de dióxido de azufre, gases que llegan a zonas como Punta Gorda.