Los afectados aseguran que tienen muchas dificultades para comunicar los positivos a las autoridades sanitarias
Los afectados por la COVID-19 que se han realizado un test de antígenos tienen muchos problemas para comunicar los positivos a Sanidad. La última semana ha dejado más de 20.000 positivos por COVID-19 en Canarias, aunque si la cifra la comparemos con una semana antes, el número de contagios disminuyó en casi 10.000 casos nuevos.
Descenso que encontramos también en el número de pruebas oficiales realizadas por los equipos del Servicio Canario de Salud (SCS), perteneciente a la Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias, que bajan de 97.000 a 73.000, un 24% por ciento menos.
De momento es pronto para afirmar que la curva comienza a decrecer, mientras que por otro lado están todos aquellos positivos que se localizan por medio de los test de antígenos que los canarios han utilizado para auto-diagnóstico.
Problemas en la notificación
La dificultad principal es comunicar estos datos positivos en los test de antígenos a las autoridades sanitarias. Retrasos e incidencias que provocan, aseguran los afectados, que algunos casos queden sin notificar.
Desde la asociación de médicos de Atención Primaria aseguran que la saturación de la línea repercute en los centros de salud y que apenas han notado descenso en la presión asistencial.
La Atención Primaria en los centros de salud de las islas registran retrasos importantes para consultas con cita previa. Además, la presión está generando que muchos sanitarios requieran de ayuda psicológica para hacer frente a la situación.
Las autoridades insisten en mantener todas las medidas de seguridad para evitar contagios en esta nueva ola por la incidencia de la variante ómicron.