El obispo de Tenerife dijo que la homosexualidad es «pecado mortal» si se ejerce de forma consciente y sin presiones
La Fiscalía de la Audiencia Provincial de Santa Cruz de Tenerife ha abierto diligencias para investigar al obispo de Tenerife, Bernardo Álvarez. Lo hace por si sus recientes críticas a los homosexuales son constitutivas de un delito de odio.
Este proceso, que no conlleva que Álvarez sea llamado a declarar ni que se formule denuncia contra él, sí implica que se pueda ordenar cuantas diligencias sean pertinentes. Todo ello para dilucidar si los hechos son constitutivos de delito o no.
Declaraciones al programa Buenas Tardes Canarias de Televisión Canaria
Álvarez dijo en el programa ‘Buenas Tardes Canarias’ de Televisión Canaria que la homosexualidad era «pecado mortal» si se ejercía de forma consciente y sin presiones. La llegó a comparar con el alcoholismo.
La campaña de firmas lanzada a través de la plataforma change.org para que Álvarez sea cesado en su cargo roza ya las 57.000. Fue lanzada por el colectivo Diversas.
Pidió perdón
Tras lo ocurrido, el obispo de Tenerife, Bernardo Álvarez, pidió perdón por sus declaraciones sobre la homosexualidad. Admitió que no estuvo «acertado».
En un comunicado pidió perdón «a cuantos haya podido ofender con mis palabras, de manera especial a las personas LGTBI, a quienes expreso mi respeto».
El obispo dijo que «he de reconocer que no estuve acertado al responder a algunas cuestiones que requieren una más detenida reflexión y explicación».
Las palabras de Bernardo Álvarez causaron un enorme revuelo y generaron un rechazo en la sociedad y en la clase política. Numerosas figuras públicas se han posicionado en contra de las ideas del obispo, incluso el presidente de Canarias, Ángel Víctor Torres, que las calificó de «inaceptables«.
Si Podemos Canarias pedirá una condena del Parlamento y del Gobierno canario de las palabras del Obispo. También piden que el obispo no sea invitado a actos institucionales laicos
También se han pronunciado sobre este asunto el presidente del Cabildo de Tenerife, Pedro Martín y de la alcaldesa de Candelaria, Mari Brito.