El portavoz de ERC, Gabriel Rufián, asegura que «no es cierto» y habla de abstención «si se da una derogación real de la reforma laboral del PP»
Mañana se vota en el Congreso de los Diputados la reforma laboral que ha elaborado el Gobierno de España. Sin embargo, el Ejecutivo central aún no cuenta con el sí del PNV, con el que negocia, ni con el de ERC, del que asegura, espera respuesta.
«Hemos presentado propuestas respetando el acuerdo de diálogo social que no han sido respondidas«, dice la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz.
Por su parte, el portavoz de ERC, Gabriel Rufián, responde que «da su palabra» de que «no es cierto. No se mueven en nada».
Su socio de gobierno podría abstenerse si se diese «una derogación real de una reforma laboral del Partido Popular que provocó muchísimo dolor». Una reforma, añade, «que precarizó a toda una generación, y esta gente tiene la mayoría necesaria para hacerlo».
Mientras, patronal y sindicatos continúan aferrados al acuerdo. El presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, afirmó: «Hemos trabajado nueve meses, hemos trabajado muy intensamente, y estamos satisfechos con lo que se ha conseguido. Creemos que es bueno para el país«.
El secretario de Organización de CCOO, Agustín Martín, hace un llamamiento a todo el arco parlamentario para que piensen en la gente. «Se trata de una reforma que va y tiene que estabilizar el empleo«.
El principal partido de la oposición, el Partido Popular, acusa a Díaz de presentar una reforma «que está pensada para asegurar su empleo, señora Díaz, no el trabajo de miles de personas que trabajan en el campo o en el sector del motor».
Desde Moncloa trabajan ya en un plan B que incluiría los votos de Ciudadanos y los nacionalistas canarios para asegurar la convalidación.