Escepticismo de Estados Unidos frente a Rusia. Un alto cargo ha asegurado que se trata de una maniobra pública mientras «se movilizan en privado para la guerra» en Ucrania
Las autoridades de Rusia han asegurado este jueves que nuevas unidades blindadas del Distrito Militar Oeste han empezado a retirarse de una zona cercana a la frontera con Ucrania para volver a sus cuarteles, una vez finalizadas unas maniobras en este área del país.
El Ministerio de Defensa ruso ha señalado en su página web que estas unidades blindadas «han empezado a moverse hacia su punto de despliegue permanente tras completar los ejercicios planificados en las zonas de entrenamiento». Si bien no ha especificado su destino, ha resaltado que se trasladarán a una distancia de unos mil kilómetros.
«A su llegada al punto de despliegue permanente, el personal militar tendrá que llevar a cabo tareas de mantenimiento del equipamiento militar». «Y prepararlo para nuevas actividades de entrenamiento en combate planificadas durante el periodo de entrenamiento invernal», ha manifestado el Ministerio de Defensa.
Buques de guerra inician maniobras en el mar Caspio
Por su parte, el Ministerio ha anunciado en un segundo comunicado que una veintena de buques de guerra han iniciado maniobras en el mar Caspio después de partir del puerto de Majachkalá. En los ejercicios participan una fragata, seis corbetas, lanchas artilladas y detectores de minas.
«La tripulación de los barcos de la Flotilla del Caspio tendrán que llevar a cabo tareas de entrenamiento en combate con el propósito determinado en condiciones ambientales difíciles y actuar sobre varias indicaciones llegadas desde el puesto de mando de la flota», ha detallado.
Escepticismo de Estados Unidos
Durante los últimos días, Rusia ha anunciado el repliegue de fuerzas de la zona fronteriza con Ucrania, incluida la península de Crimea, si bien desde Estados Unidos se han mostrado escépticos. De hecho, un alto cargo estadounidense afirmó el miércoles que las el número de tropas habrían aumentado en 7.000 en los últimos días.
«Todos los indicios que tenemos ahora son sólo para hablar públicamente y hacer afirmaciones sobre la reducción de la escalada, mientras se movilizan en privado para la guerra«, dijo este alto cargo, desmintiendo así la retirada rusa anunciada por Moscú en la frontera ucraniana, según recoge la cadena CNN.
La tensión en torno a Ucrania ha aumentado durante los últimos meses ante el despliegue de efectivos rusos junto a la frontera del país. La comunidad internacional lo ha entendido como un posible preparativo de cara a una «invasión«. Rusia ha rechazado dichas acusaciones y ha acusado a la OTAN de incrementar la actividad militar en la zona.