Las peticiones de indemnización aumentan cada día, alcanzando una suma histórica en el archipiélago
El Consorcio de Seguros ha recibido 7.768 peticiones de indemnización por los daños producidos por el volcán, y el número continúa creciendo diariamente. El director de operaciones del Consorcio de Compensación, Alejandro Izuzquiza, afirma que este incremento se debe a la apertura de zonas de exclusión del volcán de La Palma, a las que se suman las reclamaciones por cenizas.
Desde la nota informativa de abril, se han sumado 1.415 solicitudes de indemnización. Se trata de «algo insólito en los 54 años de historia del consorcio. Evidentemente tenemos ahora nuevas solicitudes o en zonas restringidas, o zonas de imposible acceso o siniestros pequeños de limpieza de cenizas», añade Izuzquiza. En la mayoría de los casos, las denegaciones de indemnización están relacionadas con la contratación del seguro en un plazo inferior a los siete días previos a la erupción del volcán del La Palma.
Hasta el momento, el Consorcio de Seguros solo ha abonado 199 millones, el 87% del coste estimado, unos 228 millones. En esta misma línea, ha señalado la dificultad al determinar la titularidad de algunos bienes y hallar a sus dueños, pues existen infinidad de inmuebles y fincas sin registro. Además, el peritaje de algunas propiedades resulta un auténtico problema, ya que se encuentran sepultadas por las coladas.
Reconstrucción de La Palma tras el volcán
Los planes de reconstrucción de La Palma avanzan con lentitud, y el Jefe de Servicio de Cambio Climático e Información Ambiental, Gustavo Pestana, asegura que es complicado cumplir los plazos establecidos. Uno de los grandes impedimentos ha sido las elevadas temperaturas que continúan imperando en muchas zonas. Algunas alcanzan los 400ºC, por lo que materiales como el hormigón no pueden secarse.
Según Pestana, se enfrentan a múltiples dificultades e incógnitas pues, aunque en los últimos 70 años han tenido lugar tres erupciones, «estamos aprendiendo sobre la marcha«. A ello se le suma que, a principios de año, el avión encargado de realizar la cartografía de las zonas afectadas sufrió una avería.