El Congreso ampliará los derechos de las empleadas del hogar, entre otros, a la protección por desempleo. La votación ha tenido 341 votos a favor, ningún rechazo y una abstención
El pleno del Congreso de los Diputados ha respaldado la ratificación del convenio 189 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT). Con él amplía los derechos de las empleadas del hogar, entre otros, la protección por desempleo. La ratificación ha salido adelante con 341 votos a favor, ningún rechazo y una abstención.
Este convenio, que el Gobierno remitió a las Cortes hace poco más de dos meses, garantiza que los derechos de las empleadas del hogar disfruten de condiciones equitativas y no menos favorables que las condiciones aplicables al resto de las personas trabajadoras.
Actualmente, las empleadas domésticas, enmarcadas en un régimen específico de la Seguridad Social, no tienen derecho a prestación por desempleo. Algo que el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) dictaminó recientemente discriminatorio.
Desde los grupos parlamentarios se han felicitado por esta ratificación y han pedido el desarrollo reglamentario necesario para garantizar su cumplimiento.
«Es una cuestión de justicia y de dignidad», ha subrayado la diputada del PSOE María Dolores Narváez.
«Una victoria histórica»
Frente al Congreso de los Diputados, colectivos de trabajadoras del hogar y cuidados y el movimiento feminista han celebrado «una victoria histórica».
Al ratificar el convenio, España deberá adoptar medidas a fin de asegurar que los trabajadores domésticos, como los demás trabajadores en general, disfruten de condiciones de empleo equitativas y condiciones de trabajo decente.
Asimismo establece que las personas trabajadoras deberán ser informadas sobre las condiciones de empleo de forma adecuada, veraz y comprensible. Priorizará el contrato escrito y regulará la igualdad de trato con el resto de las personas trabajadoras en general en cuanto a descansos y vacaciones.
Condiciones de repatriación
También regula las condiciones de repatriación de los trabajadores domésticos migrantes al fin de su contrato. Se asegura, por otro lado, la libertad de los trabajadores para alcanzar acuerdos con el empleador sobre su residencia en el hogar de trabajo, los periodos de descanso y la conservación de sus documentos de viaje e identidad.
En cuanto a la remuneración, se estipula la percepción del salario como mínimo una vez al mes, limitando la remuneración en especie. Los ajustes legislativos que exige la norma internacional, tras su ratificación, se encuentran ya en proceso.
La vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, ya ha avanzado que, tras la ratificación se legislará para equiparar sus derechos laborales dando acceso a las prestaciones por desempleo.
Según los datos del mes de mayo del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, el total de personas afiliadas en este régimen en España es de 378.178, la gran mayoría mujeres.