Cada año, más de 5.000 devotos suben el Tamadaba para cortar un rama, que posteriormente ofrecerán a San Pedro. Es una tradición muy esperada tras dos años de pandemia
Arrancan las fiestas en honor a San Pedro en el Valle de Agaete, Gran Canaria. Con ellas, la tradicional recogida de rama. Tras dos años de pandemia, «son muchos los devotos» que formarán parte de los festejos, afirma el vicepresidente de la comisión de fiestas del Valle de Agaete, José Sosa Diepa.
Se espera que este año la ‘fiesta de la rama chica’ reúna a unas 5.000 personas, no solamente del Valle de Agaete, sino pertenecientes a todas las islas. Ejemplo de ello es Honorario Dámaso, romero mayor de las fiestas de San Pedro, que lleva 86 años yendo a buscar la rama. Nunca perderá la tradición, asegura, «tenemos que seguir lo que nuestros padres nos enseñaron».
La subida comienzan la noche del martes 27 a las 24:00, en la que infinidad de personas ascienden hasta el Tamadaba cuando no hay luz y cortan una rama. Tras ello, descienden en el amanecer y bailan la rama. Esta se ofrece a San Pedro, en un recorrido por todas las calles con un embriagador olor a tomillo.