El proyecto del Parque Nacional Marino de El Hierro divide a la población y a las autoridades políticas de la Isla. Algunos apuntan a la «falta de información» o a la posibilidad de que incremente las restricciones a sus actividades. Otros, a que sería algo «tremendamente positivo»
El Cabildo de El Hierro y los ayuntamientos no se ponen de acuerdo ante la posibilidad de convertir parte del mar herreño en un Parque Nacional Marino.
Públicamente Alpidio Armas, presidente del Cabildo de El Hierro, ha reiterado que un Parque Nacional Marino para la Isla sería «tremendamente positivo». Sin embargo, sus compañeros socialistas al frente de los consistorios, no lo tienen claro.
Por su parte, Antonio Chinea, alcalde de Valverde, asegura que no puede manifestarse por falta de información. «Lo fundamental», dice, «es que pongan sobre la mesa el documento definitivo de lo que va a suponer el Parque Nacional Marino».
Miguel Ángel Acosta, alcalde de La Frontera, apunta a que es una decisión de la población. «Se debe informar primero a la población y tomar una decisión acorde con la voluntad de los herreños», afirma.
Por otro lado, el alcalde de El Pinar, Juan Miguel Padrón, rehúsa manifestar su postura porque será «la que el pueblo decida». Sin embargo, explica que sacó «un compromiso de que viniese un alto cargo político del Gobierno central para que le explicara al pueblo, tanto de La Restinga como del Pinar, las distintas actividades que se pueden hacer en el Parque».
El proyecto del parque divide a la población herreña. Pescadores profesionales y recreativos ya han mostrado su rechazo al entender que supondrá tener más restricciones en su actividad.
