Los accidentes de trabajo han aumentado un 7,1% respecto al mismo semestre del pasado año. Siete de ellos han sido mortales
Los accidentes laborales aumentaron en Canarias en el primer semestre de este año un 7,1% en comparación con el mismo periodo de 2022, con un total de 26.620 incidencias registradas, mientras que en el conjunto del país bajaron un 0,9%.
El dato lo ha aportado el sindicato CCOO, que detalla que son 7 los accidentes de trabajo con resultado mortal; 70 graves o muy graves y el resto, leves.
De esa cantidad total, 12.462 siniestros han implicado la baja del trabajador, un 18,15% más que en el primer semestre de 2022; 12.308 sin baja (un 8,8% más) y 1.850 fueron accidentes ‘in itinere’, es decir, cuando el trabajador acudía o regresaba a su puesto (un 30,83% más).
Por sectores, el de Servicios sigue siendo el que mayor porcentaje de siniestralidad representa en el conjunto de archipiélago, con un 21,77%; seguido del sector Industrial con un 12,96, el Agrícola y Pesquero con un 10,87 y por último, de la Construcción con un 7,3%.
El Índice de Incidencia del período enero-junio 2023 es de 1.435,29 accidentes de trabajo con baja en jornada de trabajo por cada 100.000 trabajadores afiliados a la Seguridad Social con las contingencias profesionales cubiertas, un 12,86% superior al registrado en el mismo período de enero a junio de 2022.
Las formas más frecuentes en las que se han notificado estos accidentes graves y muy graves son el “sobreesfuerzo físico-sobre el sistema musculoesquelético”, seguido del “golpe sobre o contra resultado de una caída” y el contacto con un agente material cortante.
Los accidentes mortales se deben mayoritariamente a patologías no traumáticas
En cuanto a los accidentes de trabajo mortales, de las siete personas fallecidas en el periodo de enero a junio de 2023, cinco de ellos han sido producidos por infartos, derrames cerebrales y otras patologías no traumáticas.
CCOO apunta a la posible relación con «una inadecuada gestión de los riesgos psicosociales y de una inadecuada gestión organizativa de la empresa, ritmos excesivos, objetivos difícilmente alcanzables… así como la necesidad de establecer políticas de promoción de la salud en las empresas».