Este viernes no se cerrará la negociación sobre las nuevas reglas de reforma fiscal de la Unión Europea, pero la ministra de Economía, Nadia Calviño, asegura que podría ocurrir en «próximos días»
La vicepresidenta primera y ministra de Economía, Nadia Calviño, ha descartado poder cerrar este viernes la reforma fiscal de la UE, aunque ha asegurado que está «cerca» y que espera un acuerdo en «próximos días», incluyendo la posibilidad de convocar una reunión extraordinaria de los ministros económicos de los Veintisiete.
Tras los «intensos» intercambios de los ministros, Calviño considera que la negociación ha llegado «casi al final» y reconoce «progresos significativos». Por ello, espera finalizar en los «próximos días» las consultas pendientes y, «si es necesario», convocará un nuevo Ecofin tras la cumbre del 14 y 15 de diciembre.
La negociación para acordar la reforma de las nuevas reglas que, tras cuatro años congeladas por la pandemia, volverán a limitar la deuda y el déficit de los Estados miembro, después de que se saldase sin acuerdo el debate durante la madrugada de este viernes, que se ha prolongado durante unas ocho horas, hasta pasadas las 3 de la mañana.
«Acuerdo de principios»
«Las discusiones muestran que hay un acuerdo de principios sobre dónde queremos que esté la zona de aterrizaje, pero no hemos finalizado todos los elementos porque algunos países necesitan llevar a cabo consultas políticas a nivel nacional y se necesita más trabajo técnico para concretar los detalles», ha explicado la ministra, en su papel de presidencia del Consejo, a su llegada al encuentro con sus pares este viernes en Bruselas.
Calviño ha confirmado en declaraciones a los medios que este jueves se puso sobre la mesa un nuevo texto que, a su juicio, «reúne todos los elementos en discusión», aunque está pendiente ahora de una revisión política, jurídica y técnica por parte de las capitales, lo que puede dilatar el proceso.
«Mi resumen de la jornada de ayer es que trabajamos duro durante una larga y productiva noche; casi estamos ahí y hemos logrado avances significativos», ha apostillado la vicepresidenta, que mantiene su intención de que sea la presidencia española la que logre un acuerdo sobre el texto antes de que acabe el año.