Habrá mayor control de las fronteras exteriores y los gobiernos podrán eludir la acogida de migrantes
El pleno del Parlamento Europeo ha dado este miércoles luz verde al Pacto de Migración y Asilo. Este reformará la política común con un mayor control de las fronteras exteriores de la Unión Europea. Ofrecerá a los gobiernos una ‘solidaridad a la carta’ que les permitirá eludir la acogida de parte de los migrantes reubicados si pagan una compensación.
Se supera así el penúltimo trámite, tras años de bloqueo por las profundas diferencias entre gobiernos, para que el nuevo marco común sea legislación. Su ratificación culminará una vez que los Veintisiete den también su visto bueno antes de que acabe este mes.
«Gracias por el coraje para comprometerse», ha escrito en redes sociales la comisaria de Interior, Ylva Johansson. Celebró la adopción en la Eurocámara de un paquete legislativo que horas antes en el debate parlamentario defendió como histórico y una posibilidad de asegurar una gestión «ordenada» de los flujos migratorios y un mejor control de fronteras.
Un grupo de activistas han intentado interrumpir la sesión de votaciones desde la tribuna de visitantes al grito de «El pacto mata, no lo voten». Tras llamar a la calma, la presidenta de la institución, Roberta Metsola, y unos minutos de espera, se han podido celebrar las votaciones.
Nuevo reglamento
Entre las claves se prevé un examen más rápido de las solicitudes de asilo, también en las fronteras exteriores de la UE. Además de medidas para garantizar deportaciones más efectivas frente a los bajos índices actuales.
Se mejorará la identificación a la llegada y serán obligatorios los controles sanitarios, de seguridad y de vulnerabilidad para los migrantes llegados por rutas irregulares.