El cierre de la residencia de ancianos, Dulce Hogar, en el municipio grancanario de Santa Brígida continúa paralizado más de una semana después
Hace más de una semana el Gobierno de Canarias decretó el cierre de la residencia Dulce Hogar, ubicada en el municipio grancanario de Santa Brígida, por no ajustarse a la normativa vigente.
Sin embargo, el desalojo del centro no se llegó a ejecutar debido a que aún quedaban algunos residentes en su interior.
Condiciones insalubres
Este miércoles los trabajadores de la residencia han denunciado las condiciones insalubres en las que están viviendo, con basura acumulada y prácticamente sin recursos.
Los siete trabajadores que quedan piden que se tomen medidas urgentes en el interior de la residencia en la que todavía permanecen cinco personas.
Los empleados, que aún no han cobrado, aseguran que ya se están acumulando varios kilos de basura y esto ha hecho que proliferen las ratas y varios insectos.
Por su parte, la empresa responsable del lugar sigue sin querer hacer declaraciones sobre esta situación.
Reubicaciones de los últimos usuarios
Por otro lado, las cinco personas que aún permanecían en la residencia ya están siendo reubicadas. Entre este jueves y este viernes, cuatro de ellas se trasladarán a otros centros sociosanitarios.
Con la residencia casi vacía, solo faltaría solucionar un último expediente.