La mujer intentó introducir cannabis y cocaína durante una visita a su hijo, que permanece interno en el centro
Una mujer ha aceptado ser responsable de intentar introducir droga en la prisión Tenerife II donde está interno su hijo, por lo que la madre cumplirá una pena de tres años y el pago de 2.500 euros.
En un principio la Fiscalía solicitaba 7 años de prisión y la misma multa que finalmente acepta pagar.
Los hechos ocurrieron sobre las 10:45 horas del día 2 de septiembre de 2022 cuando la acusada acudió al centro penitenciario a fin de realizar una visita a su hijo, que permanece interno en esta prisión.
Al pasar el control de seguridad, los agentes detectaron que dentro de las pertenencias que iba a entregar a su hijo llevaba casi 36 gramos de cannabis repartidos en dos trozos envueltos en plástico transparente. Además, llevaba encima un envoltorio con casi diez gramos de cocaína con una pureza del 74%.
Ante el tribunal la acusada asumió que pretendía introducir estas sustancias en el mercado ilícito de consumidores, dentro del Centro Penitenciario donde podría haber alcanzado un valor de 812,50 euros.
El juicio previsto en la Audiencia Provincial de Santa Cruz de Tenerife, no tuvo lugar porque previamente se alcanzó una condena de conformidad entre su abogado y la Fiscalía.