Las protestas fueron convocadas en ambas islas por colectivos que ligan la llegada de migrantes con la inseguridad ciudadana
Este domingo, más de mil personas en Santa Cruz de Tenerife y unas 1.500 en Las Palmas de Gran Canaria recorrieron las calles con un mensaje de protesta, ligando la inmigración con el aumento de la delincuencia y la presión sobre los servicios sociales.
El ‘influencer’ canario Rudy Ruymán se dirigió al público
En la capital tinerfeña, el ‘influencer’ canario Rudy Ruymán se dirigió al público. Ruymán destacó el temor creciente entre los canarios, mencionando el miedo que muchos sienten al salir a la calle. «Si hoy tenemos miedo, ¿qué será dentro de veinte años?», cuestionó. Para él, la presencia creciente de inmigrantes en las calles genera incertidumbre entre la población local.
Ruymán afirmó que existe un «efecto llamada», refiriéndose al flujo migratorio hacia las islas, y señaló presiones políticas sobre los jueces. También mencionó que los miembros de las Fuerzas de Seguridad se sienten atemorizados. En un gesto de apoyo, los asistentes dedicaron aplausos a estos efectivos, quienes se enfrentan, según los manifestantes, a una situación compleja.
Durante el recorrido, los cánticos reflejaron un descontento hacia el presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez. Los manifestantes lo señalaron como responsable de una supuesta «invasión» y lo tildaron de traidor. Entre gritos y pancartas, recalcaron que, para ellos, la situación actual no responde a la compasión, sino a un problema de seguridad.
