Raúl Díaz, el principal investigado por el homicidio de su mujer, Romina Celeste y que aún está pendiente de juicio, deberá permanecer en prisión provisional, al menos, durante dos años más.
Así lo ha decretado la jueza que instruye el caso. Como adelanta el periódico Canarias 7, la jueza ha tenido en cuenta el riesgo de fuga y la destrucción de pruebas del único sospechoso.
Díaz confesó que quemó el cadáver de su esposa en una barbacoa, descuartizó su cuerpo y tiró sus restos al mar. La fiscalía lo considera responsable de un delito de homicidio, maltrato, profanación de cadáver y simulación de delito.