La ONG ha lanzado una campaña para recoger firmas a través de su página web para pedir al Gobierno central que reconsidere su política migratoria.
La Unión Europea propone un nuevo pacto de asilo y migración que ha sido rechazado por todos los organismos sociales que trabajan en torno a esta situación. De ser aprobado, la principal responsabilidad de la gestión recaería sobre los países receptores de migrantes.
La Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR) ha pedido al Gobierno que no convierta a las Islas Canarias en «grandes campos de contención de personas», donde se retiene durante meses a miles migrantes llegados en patera, con sus «vidas paralizadas» y sus derechos, «vulnerados».
CEAR ha lanzado este lunes «aISLAdas», una campaña de recogida de firmas a través de su página web para pedir al Gobierno central que reconsidere su política migratoria y «facilite los traslados de las personas migrantes y refugiadas que han llegado a Canarias en los últimos meses de forma que dejen de estar atrapadas en las islas».
«España no puede ser el laboratorio del errático del Pacto de Migraciones y Asilo presentado por la Comisión Europea, convirtiendo nuestras islas en grandes campos de contención de personas, en contra de lo que España junto al resto de países mediterráneos manifestó con contundencia frente a la Comisión y que nuestro presidente del Gobierno calificó como ‘inaceptable'», dice.
En un comunicado, la directora de CEAR, Estrella Galán, critica que, «sorprendentemente», se esté aplicando en Canarias «esa misma política» que España rechazó en su momento, «dificultando y bloqueando sine die a las personas migrantes contra su voluntad, en un espacio territorial aislado, ultraperiférico y alejado de Europa».
«Con estas políticas, las personas migrantes y solicitantes de asilo se encuentran atrapadas, con sus vidas paralizadas y viendo como sus derechos son vulnerados», denuncia.
Política de traslados
La ONG reclama al Gobierno una política de traslados de migrantes a la Península «ágil y transparente», que permita «redistribuir» a estas personas de forma «equitativa y solidaria, entre todas las comunidades autónomas.
Al mismo tiempo, CEAR sugiere que el Ejecutivo español inste al resto de estados miembros de la UE «a ofrecer plazas de reubicación y a que la Comisión Europea apoye esta propuesta, tal y como se hizo en 2015 con el incremento de llegadas en Grecia e Italia».
Un total de 23.023 inmigrantes llegaron a Canarias en pateras o cayucos en 2020. El Ministerio de Inclusión Social acaba de terminar la construcción de su red de campamentos provisionales en Gran Canaria, Tenerife y Fuerteventura, con capacidad para 7.010 personas. Lo campamentos albergan a migrantes que durante los últimos meses han permanecido temporalmente en establecimientos turísticos.
A esas 7.000 personas en campamentos, se suman unos 2.600 menores tutelados por el Gobierno canario en otro tipo de centros.
No bloquear la salida de los migrantes
En varias ocasiones, el Gobierno de Canarias y varias ONG han pedido que se agilice el traslado de esas personas a la Península o, al menos, no se bloquee el acceso a los aeropuertos y puertos a aquellos que tienen pasaporte y han comprado pasajes aéreos o marítimos para viajar al continente.
El Gobierno central siempre ha respondido que los traslados se limitan a personas con perfiles especialmente vulnerables, porque generalizarlos podría supone un estímulo a la llegada de nuevos inmigrantes por vía marítima a las islas.
