La Guardia Civil amplía la búsqueda por mar al sureste de la isla y registra la casa del padre de las niñas | La silla de retención infantil que apareció flotando es de una de ellas
Los investigadores encargados de aclarar la desaparición de un padre y sus dos hijas en Tenerife han hallado restos de sangre en la embarcación propiedad del progenitor. El navío fue utilizado por él mismo horas antes de que se denunciase el suceso. Oficialmente, aún no se ha dado a conocer a quién pertenecen estos restos biológicos. La Guardia Civil pide la colaboración ciudadana para tratar de dar con ellos.
Mientras, el dispositivo de búsqueda del padre y sus dos hijas se ha ampliado por mar hacia el sureste de Tenerife. También han explicado que la silla infantil de retención en vehículos que se encontró flotando en el océano es propiedad de la familia. Durante el jueves, el rastreo se llevó a cabo por la zona noroeste de Tenerife, entre Punta de Anaga y Güímar, y este viernes se ha extendido en varios kilómetros cuadrados.
Registran el domicilio
Además, agentes que están al cargo de la investigación han registrado el domicilio del padre de las niñas, ubicado en Candelaria. De allí han sacado una bolsa, cuyo contenido no ha trascendido. Igualmente, han precintado la vivienda.
En la búsqueda participan unidades aéreas, terrestres y submarinas tanto de Guardia Civil como de Salvamento Marítimo y Grupo de Emergencias y Salvamento. Se mantienen varias líneas de investigación acerca de la desaparición de Tomás Antonio G. y sus dos hijas, de 1 y 6 años.
La desaparición se produjo el pasado martes, cuando la madre presentó una denuncia porque el padre no había entregado a las niñas a la hora acordada.
Al día siguiente a la desaparición se encontró vacío y alejado de la costa el barco del padre, y el juzgado de primera instancia e instrucción número 3 de Güímar incoó diligencias previas por la presunta comisión de un delito de secuestro.
Las cámaras de vigilancia de la marina donde tenía su sede la embarcación lograron registrar varios movimientos del padre, con bolsos y maletas, pero a las menores no se le ven en ningún momento.