La línea de la costa ha avanzado debido a la lava que todavía sigue cayendo, según informa Raúl Pérez, del Instituto Geológico Minero de España (IGME)
La línea de la costa en la playa de Los Guirres (Tazacorte) ha avanzado -desde la zona original- unos 30 metros hasta unirse con el delta lávico, debido a la lava que todavía sigue cayendo sobre ella.
Así lo ha explicado Raúl Pérez, del Instituto Geológico Minero de España (IGME), quien detalla que «el mar ha hecho su acción» cerrando parte de la entrada de dicha playa y creando una efímera piscina central de agua caliente, que interacciona con el frente de la colada, dejando partes más enfriadas de la nueva colada y formando una nueva línea de costa.
La sismicidad se mantiene, aunque con menor número de seísmos. Según los últimos datos del Instituto Geográfico Nacional (IGN), durante la madrugada de este lunes se han registrado 18 terremotos en la isla de La Palma, uno de ellos de magnitud 4,4, que ha tenido lugar a las 03,53, hora insular, en Villa de Mazo, a 38 kilómetros de profundidad y III grados de intensidad máxima.
Informe del DSN
El ultimo informe del Departamento de Seguridad Nacional (DSN) confirma que la sismicidad en La Palma se mantiene a profundidades superiores a 20 kilómetros, pero la intermedia continúa siendo baja y localizada en las mismas zonas.
En cuanto a la superficie afectada por la erupción volcánica, el DSN la eleva a 1.019,79 hectáreas, 1,12 hectáreas más que en la última actualización que atribuye al delta lávico, mientras la anchura máxima entre coladas se mantiene en 3.100 metros.
La lava «discurre por las coladas existentes en un único cauce que se bifurca en ocasiones, especialmente en la zona baja, y llega al mar por tres puntos», según la información facilitada por el Plan de Emergencia Volcánica de Canarias (Pevolca).
El DSN informa también de que continúa siendo alta la emisión de dióxido de azufre asociada al penacho volcánico, a pesar de que en las últimas horas ha disminuido respecto a jornadas anteriores.
Los científicos que analizan la erupción del volcán de Cubre Vieja declararon ayer domingo que el descenso en los niveles de dióxido de azufre y en los seísmos a profundidad intermedia podría indicar que el sistema volcánico cada vez tiene menos energía.
A ello añadieron que los niveles de sismicidad intermedia, tremor, deformación y dióxido de azufre muestran una tendencia estable o a la baja, a pesar de lo cual los expertos son partidarios de esperar a que los valores se mantenga en el tiempo para augurar un próximo final de la erupción.