El rey Felipe VI viaja este domingo a la capital brasileña para asistir en representación de España a la ceremonia de toma de posesión como nuevo presidente de Brasil de Luiz Inácio Lula da Silva
En el avión de la Fuerza Aérea Española en el que viajará Felipe VI, se desplaza también el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, no así la vicepresidenta y ministra de trabajo, Yolanda Díaz, quien se unirá a la comitiva oficial española a su llegada a Brasilia.
El rey forma parte de la docena de jefes de Estado que va a ser testigo del relevo en la presidencia brasileña. Que pasa a ocupar Lula después de cuatro años de mandato de Jair Bolsonaro, a quien derrotó con un 50,9% de los votos en las elecciones celebradas el pasado mes de octubre.
Además del monarca, se esperan al menos 19 jefes de Estado y de Gobierno, entre otros, los de Argentina, Bolivia, Colombia, Chile, Ecuador, Paraguay, Uruguay, Alemania y Portugal.
También podría asistir el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, después de que el Gobierno brasileño anulara este viernes un decreto que impedía su entrada al país.
Primera vez en Brasil como rey
Es la primera ocasión en la que Felipe VI pisa Brasil desde que relevó en el trono a Juan Carlos I en junio de 2014.
La última vez que lo hizo fue en 2011, tres meses antes de la abdicación de su padre, cuando asistió como príncipe de Asturias a la investidura de Dilma Rousseff, quien sucedió a Lula da Silva tras ser presidente entre 2003 y 2010.
Don Felipe también había estado en Brasilia en 2003 cuando Lula da Silva asumió el poder en su primer mandato.
En la toma de posesión de Bolsonaro hace cuatro años, España estuvo representada por la entonces presidenta del Congreso, Ana Pastor.
La fría relación que el Gobierno de Pedro Sánchez ha mantenido con Bolsonaro ha provocado una paralización en el intercambio de visitas de máximo nivel que el Ejecutivo espera reanudar con la nueva etapa de Lula da Silva.
Don Felipe ya ha mantenido varios encuentros con el nuevo presidente, el último en diciembre de 2015, cuando le recibió en el Palacio de la Zarzuela con motivo de su visita a España.
En 2003, el príncipe entregó a Lula da Silva el Premio Príncipe de Asturias de Cooperación en Oviedo en reconocimiento a su trabajo en favor de los trabajadores y de erradicar la pobreza tanto en su país como en el resto de América Latina.