La Guardia Civil está realizando gestiones «en el ámbito civil» para poder disponer de soluciones tecnológicas que permitan sustituir al buque en las labores de rastreo
El buque oceanográfico Ángeles Alvariño permanecerá en la zona de búsqueda de Anna, de un año, y su presunto asesino Tomás G. «unos días más», según han confirmado fuentes de la Delegación del Gobierno en Canarias.
Está previsto que el Ángeles Alvariño regrese próximamente al puerto de Santa Cruz de Tenerife para realizar labores de mantenimiento del equipo con el que está dotado, un sonar de barrido lateral y un robot submarino no tripulado, y que tiene «una operatividad limitada para trabajos continuados».
Se trata de un sonar de barrido lateral y de un robot submarino no tripulado, el Liropus 2000, que permitieron localizar y rescatar el cadáver de Olivia, la mayor de las niñas, a una profundidad de unos mil metros.
La previsión era que el buque dejara este miércoles la búsqueda de Anna y Tomás, aunque el Delegado del Gobierno en Canarias, Anselmo Pestana, ya había avanzado por la mañana negociaciones para una nueva «prórroga» de la estancia del Ángeles Alvariño en aguas de Tenerife.
La familia pide que el buque continúe la búsqueda
Mientras, la madre de Anna y Olivia, Beatriz Zimmerman, ha impulsado una campaña de recogida de firmas en internet para solicitar que el buque oceanográfico mantenga su apoyo a las labores de búsqueda «hasta que todas las zonas de sus posibles ubicaciones -de la niña y de Tomás Gimeno- estén totalmente y de forma exhaustiva revisadas y así quede avalado por los investigadores de la Guardia Civil».
