Una treintena de afectados por el volcán son trasladados de alojamiento para estar más cerca de sus familiares y sus trabajos
Una treintena de afectados por la erupción de La Palma han sido trasladados de alojamiento desde Fuencaliente a Los Cancajos para estar más cerca de sus familiares y sus trabajos.
Llevaban más de dos meses en el hotel Prince, adonde llegaron prácticamente con lo puesto o con las pocas pertenencias que pudieron recoger antes de ser desalojados.
Ahora, estos vecinos de La Palma se ahorrarán cerca de dos horas de trayecto para ir a trabajar. «Todos los días hago un recorrido de hora y media. Es tiempo invertido y gasolina gastada», dice uno de ellos.
Los afectados agradecen el traslado, lo que les permitirá ganar calidad de vida, a pesar de las circunstancias que sufren por la erupción del volcán. «Entro a las siete de la mañana a trabajar, salgo a las cinco y media. El camino es largo, las carreteras no son buenas y, además, es de noche», afirma otro de los vecinos.
Pese a todo, piden no ser olvidados, que lleguen las ayudas y que pronto puedan tener un techo bajo el que volver a empezar de cero.
Otros, ya han tenido más suerte y han recibido las llaves del que será su nuevo hogar.
