El volcán de La Palma deja imágenes tan impactantes como la de la apertura de una boca eruptiva en la puerta de la casa de Amanda
Hace cinco días, una boca eruptiva emanó del suelo frente a la casa de Amanda. La había reformado hacía dos meses. Allí vivía con su pareja y su bebé.
Asegura que los recuerdos y las fotos es lo que más echa de menos. «Cosas materiales hay más, pero lo sentimental no se puede recuperar», dice.
Pese a todo, esta joven prefiere poner buena cara a la fuerza de la naturaleza. «Un punto turístico allí para quien quiera ver el agujero», señala.
Afirma que con todo lo que está pasando en La Palma, «uno se ríe, porque ya no queda otra».
Amanda subraya que fue la llamada de un familiar quien la alertó de la boca volcánica que se acababa de abrir en la puerta de su casa. «Mi prima me mandó la foto y fue entonces cuando me enteré», dice.
La vivienda está situada en la zona de exclusión, al sur del cono principal.
La colada que arrasó con la casa de Amanda también destruyó el cementerio de Las Manchas.