La víctima de 12 años ha fallecido tras las heridas recibidas en el bombardeo turco en la aldea de Zorava, al este de Kobane
Al menos 17 personas han muerto, entre ellas un niño, y cerca de una docena han resultado heridas como consecuencia de una nueva serie de ofensivas lanzadas por el Ejército de Turquía sobre las fuerzas kurdas asentadas en la ciudad siria de Kobane y sus alrededores.
La víctima, de 12 años, ha fallecido tras las heridas recibidas durante un bombardeo turco en la aldea de Zorava, al este de Kobane.
Los bombardeos han seguido produciéndose a lo largo de este martes en el centro de Kobane y las localidades cercanas a la frontera con Turquía. Los ataques se suman a los que Ankara ha estado llevando a cabo desde la noche del lunes en el norte y el este de Siria.
Las milicias kurdo-árabes afirman que el ataque era previsible
Las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS), las milicias kurdo-árabes que controlan el noreste del país, han asegurado que estos ataques se veían venir desde hace una semana. «Han estado preparándose», ha dicho uno de sus portavoces, Farhad Shami, quien ha adelantado que responderán a esta ofensiva.
«Hemos declarado anteriormente que ningún ataque del Estado ocupante turco quedará sin respuesta. Especialmente, cuando lugares de civiles, como el hospital y las casas de la gente, están siendo atacados directamente», añade.
Shami ha señalado que el objetivo de Turquía es forzar a la población a dejar sus casas. Por ello, les ha pedido que se mantengan «firmes» y «furiosos» contra la ocupación, a la que «cien por cien» responderán «en el marco de la legítima defensa».
Por su parte, las Fuerzas de Defensa del Pueblo, el ala militar del Partido de los Trabajadores de Kurdistán (PKK), han anunciado este martes la muerte de seis soldados turcos. Ha ocurrido durante una serie de enfrentamientos en la región de Werkhele, en el sur de los territorios kurdos.