Las obras para transportar agua marchan a buen ritmo y la tubería para dar riego a la mayor zona de cultivo de La Palma podría estar para principios de año
Apunto de cumplirse un año de la erupción volcánica en Cumbre Vieja, en La Palma, este miércoles, 15 de septiembre, ha tocado comprobar el estado de las obras de las canalizaciones para transportar agua que se vieron afectadas por la lava. La interrupción del suministro afectó tanto a las zonas de cultivo como al agua de abasto para la población.
Los trabajos marchan a buen ritmo y la tubería que da riego a la mayor zona de cultivo de la isla podría estar acabada a principios de año.
El paso de las coladas de lava generó una interrupción del sistema hidráulico en la isla de La Palma. El agua dejó de fluir entre norte y sur.
La emergencia hídrica empujó a buscar una solución, cinco obras que harían regresar el agua a donde más se necesitaba.
Una de ellas es la estación de bombeo de Las Cuevas, junto a una conducción de impulsión de agua de 16 kilómetros.
Una zanja en el terreno acoge todas las tuberías que permitirán que el agua de riego regrese al sur. En estos momentos, una desaladora abastece a esta zona.
La tubería Hoyas-Remo es una de las obras fundamentales. El Gobierno de España ha iniciado un expediente sancionador al Cabildo por no paralizarla. Sin embargo, el presidente del Cabildo de La Palma, Mariano Hernández Zapata, ha asegura que la obra continuará.