La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha avanzado que «el Gobierno está trabajando» en un impuesto temporal para las grandes fortunas, en línea con la propuesta de Unidas Podemos. Entraría en vigor a partir del 1 de enero de 2023
En declaraciones a los medios en los pasillos del Congreso, Montero ha defendido la necesidad de «pedir un mayor esfuerzo» a quienes tienen beneficios extraordinarios, como las empresas energéticas, y a las «mayores rentas».
Montero ha eludido dar detalles sobre el eventual futuro impuesto, porque «hay que dejar que los técnicos trabajen». Sin embargo, ha apuntado que sería temporal y se utilizaría «un esquema similar» al de los nuevos gravámenes a las energéticas y la banca, que estarán vigentes durante dos años.
«Creemos que para los próximos dos años sería importante» apoyar a los colectivos vulnerables, ha añadido. Esa sería la «premisa» del periodo de vigencia, aunque «todo va a depender de cómo se conduzca la guerra en Ucrania».
El nuevo impuesto entraría en vigor en 2023
La ministra también ha mostrado su intención de que el impuesto esté en vigor «lo antes posible», a comienzos del próximo año. Aunque «habrá que ver la tramitación». Tampoco ha desvelado si se incluirá en los Presupuestos de 2023.
«Estamos explorando diferentes alternativas», ha insistido poco después en una entrevista en La Sexta, ya que si se trata de una modificación de algún impuesto existente podría incluirse en otra ley, pero si es uno nuevo, requeriría una ley propia.
En cuanto al umbral de renta o riqueza que marcaría la declaración del gravamen, ha subrayado que estaría dirigido a «personas millonarias». Esto implica que no afectaría a más del 1 % de la población española.
Sería diferente al actual impuesto de patrimonio
Montero ha aclarado que Hacienda «lleva unas cuantas semanas trabajando de forma silenciosa». El tema ha salido a la luz a raíz de la decisión de «algunas comunidades autónomas» de suprimir el impuesto de patrimonio en sus territorios, en referencia a Andalucía y Murcia.
La ministra ha defendido la necesidad de «hacer una revisión de las aportaciones» de quienes tienen «más capacidad económica».
Este impuesto sería diferente del actual impuesto de patrimonio, que grava los patrimonios por encima de 700.000 euros -excluidos 300.000 euros de vivienda habitual-, cedido a las comunidades autónomas. Madrid (y próximamente Andalucía y Murcia) bonifica en su totalidad.
La portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez, ha coincidido en que «los que más tienen» deben «arrimar el hombro» para sufragar así las medidas que está adoptando el Ejecutivo en apoyo de las familias que peor lo están pasando tras varios meses de guerra y en un momento de alta inflación.
La ministra portavoz ha remarcado que «se están tomando medidas muy importantes y esto hay que sufragarlo». Ha considerado que «los que más tienen» deben «contribuir». Algo que ya se ha hecho con banca y energéticas y se pretende extender también a los «grandes patrimonios».