El paso de Hermine por el Archipiélago ha permitido recargar los acuíferos y bajar la dependencia al riego, algo que el sector primario agradece
El presidente de COAG-Canarias, Rafael Hernández, se ha mostrado muy satisfecho este lunes con el paso de ‘Hermine’, la tormenta subtropical, por Canarias, dado que la lluvia ha sido «serena» y permite recargar los acuíferos y bajar la dependencia de los sistemas de riego.
«Es una cosa magnífica», ha indicado en declaraciones a Europa Press dado que el archipiélago está en «sequía» y arrastra un déficit hidráulico del 40%, con algunas zonas de las islas donde era «imposible» conseguir agua. «No es que subiera el precio, es que no hay», ha comentado.
Hernández ha defendido que las lluvias de ‘Hermine’ representan una «excelente oportunidad» para los agricultores, más allá de que se puedan rellenar las presas y embalses, y además con «daños mínimos» en comparación con un «beneficio global tan grande».
«No sabemos lo que es quemar energía para fabricar agua y poder regar a lo que presenta el agua del cielo», ha agregado.
Beneficios para los cultivos
Hernández ha insistido en los beneficios para los cultivos que ya están plantados y para los venideros, ya que hay humedad en el suelo. Al mismo tiempo, ha recordado, como ejemplo, la «tensión» que había hace un par de semanas en la cuenca de San Bartolomé de Tirajana, en Gran Canaria, por los turnos de riego debido a las restricciones.
«No somos conscientes de la magnitud de todo esto», ha indicado, pronosticando que el precio del agua va a bajar.
Según los primeros cálculos del Cabildo de Tenerife en la isla se han almacenado unos 19.000 metros cúbicos entre sábado y domingo y se espera que siga entrando agua a lo largo de este lunes dado que entre tomaderos y balsas hay grandes distancias.
Las cuencas más beneficiadas han sido las de San Antonio, en La Matanza, con 2.700 metros cúbicos, Valle Molina, en Tegueste con unos 4.800 metros cúbicos y Vilaflor, que ha acumulado hasta 5.000 metros cúbicos.
Desde el Cabildo apuntan que esta lluvia aliviará al menos una semana de riego en el cultivo de la platanera por lo que se espera un incremento de almacenamiento en las cuencas de agua regenerada al no tener necesidad de consumo.