La Policía Nacional y Extranjería han detenido a nueve personas tras desmantelarse una red dedicada a la regularización de ciudadanos cubanos en Cataluña y Canarias con documentación falsificada
La Policía Nacional, en colaboración con las Oficinas de Extranjería de las diferentes subdelegaciones del Gobierno, han detenido a nueve personas tras desmantelar una red que se dedicaba a la regulación de ciudadanos cubanos mediante la falsificación de documentos públicos para la tramitación de permisos de residencia y obtención de la nacionalidad.
En un comunicado, han explicado que dos de los detenidos, de origen cubano con nacionalidad española, formaban parte presuntamente del entramado como autores intelectuales, operando desde Cataluña y las Islas Canarias, y se les imputan delitos de falsedad documental, favorecimiento de la inmigración ilegal y pertenencia a organización criminal.
Los otros siete detenidos son presuntamente clientes de esta trama, distribuidos por toda la geografía española, y se les considera responsables de un delito de falsedad documental. No obstante, no se descartan más detenciones.
La investigación empezó después de que sospecharan que ciudadanos de origen cubano habían podido simular una relación paterno-filial, haciéndose pasar por hijos de ciudadanos españoles de origen, para obtener la residencia por arraigo familiar, o la nacionalidad española.
Tras analizar las solicitudes de residencia y nacionalidad de los investigados, averiguaron que los ciudadanos españoles de origen, cuya identidad estaría siendo usurpada a fin de simular la referida relación familiar, estarían ya fallecidos, dificultando a los organismos oficiales la comprobación de dicho parentesco.
«Organización criminal»
Se constató así la existencia de una «organización criminal» que ofrecía a ciudadanos de origen cubano interesados en obtener la residencia o nacionalidad en España de manera fraudulenta a cambio de desembolsar entre 6.000 y 10.000 euros.
En una segunda fase, se buscaba a ciudadanos españoles de origen, también muertos, a fin de solicitar sus partidas de nacimiento para introducirlas en las citadas solicitudes de residencia como progenitores de estos clientes, simulando así la relación paterno-filial.
En tercer lugar, se procedía a falsificar las partidas de nacimiento de los interesados, haciendo constar en ellas «un progenitor que realmente no lo es».