Una nueva etapa en la relación bilateral marcada por «la transparencia y la comunicación permanente» entre ambos países
España y Marruecos cierran este jueves la Reunión de Alto Nivel (RAN) que han mantenido en Rabat. Ambos países han firmado varios acuerdos durante la jornada, entre ellos, dos acuerdos de gestión migratoria regular que responden a los intereses de ambos estados en esta nueva etapa en la relación bilateral.
El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, afirmó que España y Marruecos han asumido un compromiso de respeto mutuo que conlleva «evitar todo aquello que sabemos que ofende a la otra parte, especialmente en lo que afecta a nuestras respectivas esferas de soberanía».
Sánchez recalcó el pacto entre ambos países que reafirma la españolidad de Ceuta y Melilla y la nueva posición española sobre el Sáhara Occidental en una declaración al inicio del plenario de la XII Reunión de Alto Nivel (RAN), que copreside junto a su homólogo marroquí, Aziz Ajanuch, y en la que participan una veintena de ministros de los dos países.
Una declaración en la que subrayó igualmente que se va a garantizar por parte de España y Marruecos que las aduanas de Ceuta y Melilla sigan abriéndose de manera ordenada y progresiva hasta llegar a la plena normalización del paso de personas y mercancías.
«Transparencia y comunicación permanente»
El jefe del Ejecutivo, que había mantenido previamente una reunión con Ajanuch, afirmó que con esta cumbre se consolida la apertura de una nueva etapa en la relación bilateral y los dos países se comprometen a «la transparencia y la comunicación permanente«.
«Recurriremos siempre al diálogo y no a los hechos consumados», resaltó Sánchez antes de hacer hincapié en las cuestiones relativas a la soberanía de ambos países.
En ese contexto, explicó que los dos gobiernos han asumido un compromiso de respeto mutuo por el que, tanto en sus discursos como en sus respectivas prácticas políticas, «vamos a evitar todo aquello que sabemos que ofende a la otra parte, especialmente en lo que afecta a nuestras respectivas esferas de soberanía».
Un compromiso que lleva implícito el mensaje de que España seguirá manteniendo la posición que ha protagonizado Sánchez en relación con el Sáhara Occidental (asumiendo las propuestas marroquíes) y que Marruecos no hará batalla de la españolidad de Ceuta y Melilla.
Aduanas de Ceuta y Melilla
A ambas ciudades autónomas se refirió explícitamente al expresar su satisfacción por la primera expedición comercial del pasado viernes a través de las aduanas de Ceuta y Melilla.
Fue entonces cuando recalcó: «Vamos a garantizar juntos que estas aduanas sigan abriéndose de manera ordenada y progresiva hasta llegar a la plena normalización del paso de personas y mercancías, tal y como acordamos el año pasado.
Será la primera vez que habrá una aduana comercial en Ceuta, y la de Melilla se reabrirá después de que Marruecos la cerrara de forma unilateral en agosto de 2018.
A las fronteras entre ambos países hizo referencia al señalar que los dos países han reafirmado la vigencia y la integridad de todos sus acuerdos, «los que sentaron en el pasado las bases de nuestras relaciones, los que fijan nuestras fronteras y los que establecen mecanismos de cooperación avanzada».
El presidente del Gobierno destacó asimismo el compromiso mutuo de que habrá un diálogo reforzado político y de seguridad y con un mecanismo para hacer un seguimiento sistemático del cumplimiento de los acuerdos.
También se pacta una asociación económica avanzada que desarrolle nuevos proyectos de inversión y aboga por seguir trabajando con un enfoque integral y constructivo en materia de migración.
«Debemos asegurar -añadió- un avance armónico en todos los ámbitos: más diálogo político y de seguridad, más inversiones, intercambios e interconexiones, más movilidad y comunicación entre nuestras sociedades».