Las elevadas temperaturas han significado más agua, más mantenimiento y menos producción
Los episodios prolongados de calor durante este verano han pasado factura primero a la producción de uva y ahora a la de mango. En el Valle de Agaete, en Gran Canaria, se ha perdido fruta y se ha adelantado las cosechas.
Consecuencias del calor
Agosto y septiembre es la fecha habitual para recoger el mango en Agaete. Sin embargo, este año a esta fecha ya están prácticamente acabando. El calor se instaló en el Valle de Agaete, en Gran Canaria, a finales de junio con temperaturas de entre 35 y 40 grados.
Más calor del habitual y por un tiempo más prolongado en pleno proceso de maduración de la fruta. Por tanto, eso ha significado más agua, más mantenimiento y menos producción. En determinadas fincas se ha perdido hasta la mitad de la cosecha.