Las reglas diferenciadas de Canarias respecto a la península se refieren a los diferentes tipos de pesquerías o a las cuotas de pesca
El Gobierno de Canarias ha pedido este viernes el apoyo de la Federación Nacional de Cofradías de Pescadores (FNCP) a su demanda de contar con reglamentaciones diferenciadas a las que rigen en el resto de España para poder garantizar el futuro del sector pesquero del archipiélago.
Así lo ha manifestado el consejero canario de Pesca, Narvay Quintero, antes de participar en Las Palmas de Gran Canaria en la Bienal de Cofradías de Pescadores de España, la primera reunión nacional de este sector que se realiza fuera de Madrid, según ha destacado el presidente de la FNCP y marinero de Burela (Lugo), Basilio Otero, quien ha agradecido la «ayuda que siempre ha dado» el Gobierno canario a sus trabajadores.
Quintero ha explicado en estas jornadas técnicas «las diferencias que tiene el sector pesquero canario con el peninsular, trasladadas en diferentes tipos de pesquerías y cuotas de pesca».
Temporalidad de la pesca de cuotas de túnidos
El consejero ha insistido en que esta diferenciación debe aplicarse a la temporalidad de las pesquerías de cuotas de túnidos. A su juicio, en las islas «tienen que ser completamente diferentes a las de la Península», como lo son las corrientes y la temperatura del agua de este territorio, lo que determina la trayectoria de estas especies, cada vez más alejada del archipiélago por el impacto del cambio climático.
Para Quintero, las cuotas de pesca de los túnidos, recurso fundamental para la supervivencia de su flota, también tendrían que ser diferentes en Canarias, donde no existen las alternativas que tienen en la Península.
«Vamos a seguir exigiendo al Gobierno de España una mayor cuota de túnidos, principalmente de lo que llamamos aquí la tuna y del atún rojo. Ahora tenemos 560 toneladas de atún rojo al año en Canarias, cuya temporada se abrirá el 28 de enero, pero entendemos que -de cara a 2025- tenemos que tener un mínimo de 1.100 toneladas al año para que el sector pesquero canario pueda ser rentable», ha referido.
Relevo generacional y renovación de la flota
Además del relevo generacional, el consejero canario de Pesca ha estimado que otro de los asuntos que preocupa al sector en las Islas es el relacionado con la renovación de una flota que conforman más de 800 barcos y cuya antigüedad media se sitúa entre los 30 y los 40 años, la más alta del país, por lo que el Ejecutivo regional ha pedido al Ministerio que dirige Luis Planas que saque una línea de subvenciones para este fin.
«Necesitamos barcos más modernos, más respetuosos con el medioambiente y más eficaces para una pesca cada vez más selectiva y el coste de renovar un atunero cañero es de más de 400.000 euros, muy elevado para que puedan afrontarlo los pescadores. Siempre ha habido ayudas de Estado, por eso estamos pidiendo al Gobierno que saque ayudas para ello», ha apostillado.
Narvay Quintero ha precisado que solo una parte de la flota pesquera canaria, la polivalente de artes menores, cumple el equilibrio entre días de pesca y capturas que Europa exige para poder acceder a estas ayudas a la renovación.
Crecimiento azul del mundo del mar
El presidente de la Federación Nacional de Cofradías, Basilio Otero, ha informado de que en este encuentro, que se clausura este sábado, los pescadores españoles disertarán sobre economía social y también de su importante papel en el crecimiento azul del mundo del mar.
Será en la última jornada de esta bienal cuando se analicen las necesidades de quienes les demandan pescado, lo que explicará en una ponencia el presidente de la Asociación de Cadenas Españolas de Supermercados, Aurelio del Pino.
En este encuentro también se debatirá sobre las nuevas formas de comunicación, de lo que se encargará un experto en redes sociales como es Javier Botana, el pescadero conocido en este ámbito como «capitán agallas».Otero ha asegurado que el sector «está esperanzado» porque, a su juicio, «siempre tiene futuro».
«Hemos pescado desde hace más de 2.000 años, las cosas han cambiado mucho pero confío en el futuro del sector pesquero y en que la unión que tenemos las cofradías ayudará a que sea próspero y que tengamos pescado para dar a la población, porque es un alimento sano y su consumo dos o tres veces a la semana reduce la posibilidad de ictus y de infartos de miocardio, tal y como afirma el cardiólogo Guillermo Aldama», ha aseverado.
Caída del consumo de pescado
Preguntado por los factores que están detrás de la caída del consumo de pescado, ha dicho que los pescadores peninsulares «no notan el precio en lonja» y ha estimado que en Canarias «son más privilegiados porque no se vende en subasta pública».
Sin embargo, ha considerado que «hay que dar una vuelta a la forma de comercialización«, al tiempo que ha aludido a los problemas de relevo generacional, que ha relacionado con la necesidad de reforzar la formación, para lo que ha apostado por «copiar» modelos punteros, como el que opera en Asturias, «para tener, por un lado, titulados, y por otro, gente de marinería».
«También hay que entender que el sector pesquero ha sido demasiado cerrado, mucha de la culpa de la falta de relevo es que mucha gente se cree que un pescador aún lleva un parche en un ojo, una pata de palo y un garfio en la mano, y eso hace muchos siglos que no existe. Tenemos que ser más comunicativos, abrirnos más a la sociedad y decir que no hay ningún oficio mejor que el de marinero», ha recalcado.