El veredicto se ha emitido este viernes, tras el juicio celebrado esta semana y en el que la Fiscalía pidió para la acusada 14 años de prisión por los dos delitos.
La policía nacional acusada de malversación de caudales públicos y falsificación de 1.900 euros, hechos ocurridos en 2016, ha sido declarada culpable por un jurado popular de la Audiencia Provincial de Santa Cruz de Tenerife.
El veredicto se ha emitido este viernes, tras el juicio celebrado esta semana y en el que la Fiscalía pidió para la acusada 14 años de prisión por los dos delitos.
Según el Ministerio Público, la agente urdió un plan para apoderarse de dos billetes de 200 euros y tres de 500, que formaban parte de la remesa de 66.725 euros intervenida el 5 de abril de 2016 tras una intervención policial y que estaban custodiados en la comisaría de La Laguna en la que trabajaba.
Según la Fiscalía, la agente sustituyó entre el 5 y el 13 de abril los 1.900 euros por cuatro billetes de 500 y dos billetes de 200 que simulaban los obtenidos, con características que los hacían “confundibles”, según la Fiscalía, y que la misma había elaborado e impreso a tal efecto.
En la primera sesión del juicio oral, la mujer negó las acusaciones, argumentó que no tenía problemas de dinero y señaló que nunca se acercó a la caja donde se guardaba el dinero y cuya clave de acceso tenían otros agentes en la comisaría.
En las pruebas testificales, agentes policiales informaron que en el primer recuento del dinero no detectaron billetes falsos y que a través de un grupo de whatsapp, en el que estaba la acusada, se informó a todos los miembros del grupo III que se había depositado en la caja fuerte una importante cantidad de dinero hasta que quedase a disposición del Juzgado y se ingresase en la cuenta abierta a tal efecto.
Asimismo el jefe del grupo de policía científica de Santa Cruz declaró que la investigación que lideró en torno a la agente de la Policía Nacional se basó en “muy buenos” indicios y a toda una serie de acciones antes y después del intervalo entre 5 y el 13 de abril del 2016.
El agente explicó que su equipo recibió una orden sobre la posibilidad de que los billetes salieran del sitio web del Gobierno de Murcia, que al parecer había consultado la acusada aunque ésta lo negó con el argumento de que la búsqueda de billetes falsos por internet se debió a que buscaba billetes de fantasía para que su hija jugara con ellos en un mercadillo.
Sobre las búsquedas que realizó en el portátil sobre cómo borrar huellas dactilares en billetes, la acusada comentó durante su testimonio que se obsesionó por si cuando le enseñaron a todos los agentes los billetes falsos que habían sido sustituidos por los verdaderos, ella los hubiese tocado aunque finalmente no lo había hecho.