Hace justo un año, fue la tercera comunidad autónoma más visitada por turistas internacionales, por detrás de Canarias y Cataluña.
En medio de la polémica por las fiestas ilegales y el denominado «turismo de borrachera», con el foco puesto en los franceses, Madrid ha ido escalando posiciones en la pandemia hasta convertirse en el primer destino hotelero nacional.
Si bien es cierto que comparte datos vinculados a otro tipo de turistas que vienen por negocio o buscan planes culturales.
Son la cara y la cruz del turismo en Madrid, dos realidades que ya existían antes de la pandemia, que se han acentuado durante la crisis sanitaria.
Según los datos más recientes publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE), la Comunidad de Madrid recibió en enero 45.559 turistas internacionales, lo que supone un descenso del 92,5 % respecto al mismo mes del año anterior.
En enero de 2021 Madrid ocupó la quinta posición entre las comunidades autónomas al recibir un 10,5 % del total de turistas extranjeros, por detrás de Canarias (19,9 %), Cataluña (19,6 %), Comunidad Valenciana y Andalucía (ambas con el 11,4 %).
Hace justo un año la situación era mucho más favorable para Madrid, que fue la tercera comunidad autónoma más visitada, por detrás de Canarias y Cataluña.
La pandemia ha hecho perder posiciones a Madrid en el cómputo global de visitantes de otros países pero ha ido mejorando en otra estadística del INE relacionada con las pernoctaciones en hoteles hasta ocupar el primer lugar en febrero, con un 19,3 % del total seguida de Canarias (15,4 %) y Cataluña (14,3 %).
El director general de Hostelería Madrid, Juan José Blardony, señala a Efe que efectivamente «Madrid está ocupando el primer lugar en pernoctaciones de extranjeros», por encima de Barcelona, y se está notando «una mayor actividad» en la capital.
«En ciertas zonas, como en el centro, está habiendo un mayor volumen de jóvenes extranjeros y más vuelos hacia la capital buscando una mayor apertura de actividades, como la restauración y las actividades culturales, que en otros países no se produce», comenta.
El turismo en hoteles ha pasado desapercibido en medio de la polémica generada por las fiestas ilegales en pisos turísticos en Madrid, sobre todo en el distrito Centro.
El foco está puesto desde hace meses en los turistas franceses ya que, según fuentes policiales, son los extranjeros que participan en mayor medida en estas fiestas.
La polémica se ha acrecentado esta semana tras unas declaraciones de la candidata de Más Madrid a la Comunidad, Mónica García, que acusó a la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, de ser la causante del «turismo de borrachera» por las medidas más laxas contra el coronavirus y de no importarle que vengan «turistas franceses» a participar en «fiestas ilegales».
La embajada de Francia en España le respondió en Twitter: «No hacen falta ni alcohol ni alfombra roja? Como a todos los europeos, a las ‘hordas’ de franceses siempre nos gustarán Madrid y España. Desde la embajada, seguiremos trabajando con el Gobierno y todas las comunidades autónomas para luchar contra la pandemia».
Los turistas de América (sin contar Estados Unidos) fueron los más numerosos en Madrid en enero según el INE, un 21,6 % del total, seguidos de los franceses, con un 16,7 %.
Entre los factores que atraen a los franceses están la cercanía y que Madrid cuenta con menos restricciones, ya que los comercios, la hostelería y recintos culturales como los cines y teatros permanecen abiertos, mientras Francia ha decretado el cierre de todos los comercios no esenciales en buena parte del país.
El sector cultural de Madrid ha notado una mayor afluencia de turistas extranjeros y en concreto de franceses.
Por ejemplo, en el caso del Museo Reina Sofía los italianos eran los principales visitantes antes de la pandemia y hasta enero de este año, pero tanto en febrero como en marzo los franceses les han superado en número.
Fuentes del museo señalan a Efe que hasta lo que llevamos de mes, 3.000 franceses han visitado el Reina Sofía, cifra «muy superior» a la de italianos, y que contrasta con los 1.373 franceses que visitaron el centro en enero.