Con esta esta técnica con agua de niebla, que podría llegar a recoger 200.000 libros al año, se pretende llegar a otras bases militares con escasez hídrica
La primera base militar de España que se abastece con agua de niebla se encuentra en el Pico de las Nieves, en Gran Canaria.
El capitán del EVA 21, Francisco Javier Morán, explica que su funcionamiento consiste en que «cuando llega el viento, cargado de humedad, tropieza contra las mallas y se va condensando. Estas gotas van ganando en tamaño y se precipitan hacia las bandejas, que luego van por las tuberías hasta nuestro aljibe de agua potable».
Estiman que el captador llegue a recoger 200.000 litros de agua al año. Pero, ¿podrían abastecerse al completo? «En principio no cubriría toda la demanda. Nuestra intención inicial era autoabastecernos y reducir el impacto en el medioambiente; estimamos que puede cubrir un tercio de la demanda. Si da resultado, es probable que lo ampliemos», asegura el capitán del EVA 21.
Una técnica ecológica que a penas tiene necesidad de mantenimiento ni consumo energético, y con la que pretenden llegar a otras bases militares con escasez hidrica.