Estudiantes alemanes prueban un prototipo de submarino propulsado por aletas frente a las Islas Canarias. Buscan crear conciencia sobre la conservación sin dañar los ecosistemas marinos.
El submarino, diseñado por futuros ingenieros de la Universidad Hochschule Rhein-Waal, está equipado con una especie de bicicleta submarina pilotada por un buzo. La prueba la han realizado antes de participar en carreras internacionales.
El mentor de los alumnos, William Megill, dijo que participarían en su primera SubRacing Series el próximo año. Se trata de carreras celebradas en áreas clave de conservación de los océanos en todo el mundo para fomentar el conocimiento científico y la curiosidad.
Pruebas en Arinaga, Gran Canaria
En lugar de hélices afiladas que podrían atravesar la vegetación del fondo marino mientras giran, la máquina cuenta con «aletas» inspiradas en la vida silvestre acuática. Según Megill «si golpean el fondo, es como la aleta de un buzo golpeando el fondo. Una hélice que gira es como un cuchillo. No queremos hacer eso. Por eso hemos construido una máquina que puede funcionar en este entorno de forma segura y en armonía con el medio ambiente”.
Según el profesor William Megill «un estudiante construye y diseña un submarino que luego lleva a las regatas. Hemos venido aquí a Arinaga para intentar por primera vez competir en el océano”.
Sobre el motivo que les ha llevado a Canarias a probar su prototipo de submarino han explicado que aquí tienen «condiciones reales… Olas. Hay corrientes. Hay oleajes. Hay mucho movimiento bajo el agua y peces. Todas estas cosas se suman para representar un verdadero desafío para los estudiantes”.
Para la estudiante Eugenia Herrera que participa en el proyecto, el «plan es a largo plazo, al menos diez años. Ahora mismo estamos probando qué tan viable es competir con submarinos en mar abierto en lugar de tanques, que es a lo que estamos acostumbrados. La competencia sería simplemente invitar a varios grupos, al menos ocho grupos que no tienen que ser de universidades, podría ser cualquier entusiasta del buceo, a construir su propio submarino con ciertos parámetros, ciertas reglas, traerlos aquí y competir. El plan sería, en el futuro, tener una competición en toda la isla”.